BARCELONA, 27 de noviembre (EUROPA PRESS)-

Los Mossos d’Esquadra, la Policía Nacional y la Policía Urbana de Barcelona (GUB) han desmantelado una red presuntamente dedicada a la trata de seres humanos con fines de explotación sexual en centros de belleza y masajes ubicados en Barcelona y Marbella (Málaga), una actuación que se ha saldado con 8 detenciones.

Se han identificado un total de 21 mujeres explotadas -de las cuales 18 fueron liberadas- que fueron obligadas a prostituirse sin descanso, bajo vigilancia constante, sometidas a agresiones físicas y sexuales, incluso encerradas en habitaciones bajo llave, sin acceso a baño, comida ni bebida durante días, informan los Mossos en un comunicado este jueves.

Las víctimas adquirieron una deuda de 6.000 euros que tuvieron que saldar ejerciendo la prostitución las 24 horas del día, los siete días de la semana, en centros de belleza y masajes donde realizaban servicios sexuales y vendían sustancias estupefacientes.

Hay 8 detenidos, 5 de los cuales han sido puestos en prisión provisional, y se han practicado 5 allanamientos y registros en inmuebles, decretándose el cierre de los dos burdeles que simulaban ser centros de belleza y masajes.

La investigación se inició en marzo de 2025 tras la declaración de una víctima que alertaba de la existencia de una organización criminal dedicada al tráfico de mujeres de origen sudamericano para explotarlas sexualmente en supuestos centros de belleza y masajes de Barcelona y Marbella (Málaga).

CAPTURA, TRANSFERENCIA Y EXPLOTACIÓN

La red estaba formada por ocho personas que desarrollaban su actividad principalmente en Barcelona, ​​con sucursal en Marbella (Málaga) y gestionaban el traslado a España de las víctimas, a las que impusieron una deuda de 6.000 euros y a las que retuvieron el 50% de los ingresos.

Los responsables ejercían un control «total» sobre ellas, las obligaban a consumir drogas para aumentar el rendimiento y la disponibilidad, y las castigaban físicamente cuando se negaban a realizar servicios sexuales -las obligaban a practicar sexo sin preservativo-, además de restringirles sus movimientos y ser vigiladas con cámaras.

TRASLADOS EN TREN O AVIÓN A MARBELLA

La red, una vez que las víctimas fueron explotadas sexualmente durante un tiempo en el prostíbulo de Barcelona, ​​las transportaba en tren o avión hasta el prostíbulo de Marbella, siendo controladas por un miembro de la organización durante el trayecto.

El líder de la red explotó los prostíbulos creando empresas con las que pretendía realizar actividad legal, registrándolas como centros de belleza y masajes, cuando en realidad eran establecimientos donde se realizaban servicios sexuales y se vendían sustancias estupefacientes.

Durante la operación se incautaron 44.455 euros en efectivo, unos 100 gramos de cocaína, 10.158 gramos de marihuana, una moto, un reloj Rolex, 11 terminales telefónicos, diversos efectos informáticos y abundante documentación incriminatoria, y se bloquearon los activos financieros utilizados por la red.