Desmantelado en Los Alcázares (Murcia) un grupo criminal que dirigía tres puntos de venta de droga
1032714.1.260.149.20251202130303
LOS ALCÁZARES (MURCIA), 2 (PRENSA EUROPA)
La Guardia Civil ha llevado a cabo la operación ‘Tifón’ en Los Alcázares (Murcia), que se ha saldado con el desmantelamiento de un grupo criminal que regentaba tres puntos donde se distribuían una gran cantidad de sustancias estupefacientes, según informaron fuentes de la Benemérita en un comunicado.
Durante el operativo, los agentes han detenido a los diez integrantes del grupo criminal, uno de ellos menor de edad, como presuntos autores de los delitos de pertenencia a grupo criminal, tráfico de drogas, sustracción de arma de fuego, recepción y tenencia ilícita de armas; y se han incautado diversas cantidades de cocaína, base de cocaína, heroína, hachís y marihuana, así como armas y municiones, dinero en efectivo y vehículos.
Las actuaciones comenzaron el año pasado, cuando efectivos de la Policía Local de Los Alcázares informaron al Instituto Armado de la existencia de varios puntos de venta de droga en la localidad.
Estos hechos habían generado cierta alarma social y preocupación entre los vecinos de Los Alcázares, debido a la cantidad de consumidores de drogas en los alrededores de los puntos de venta de drogas, algunos muy cercanos a centros educativos.
Especialistas de la Policía Judicial abrieron el operativo y realizaron las primeras investigaciones, que permitieron detectar a un nutrido grupo de personas cuya actividad presuntamente estaba encaminada a la manipulación y venta de sustancias estupefacientes, utilizando una red criminal para su seguridad y custodia.
Los integrantes del grupo criminal eran conocidos de la Guardia Civil, ya que el principal cabecilla fue detenido en 2023 por su implicación en un tiroteo sobre un vehículo conducido por un miembro de un clan contrario.
Los investigadores dividieron la operación en varias fases. En primer lugar, llevaron a cabo una extensa vigilancia de los puntos de venta con el fin de verificar el delito de tráfico de drogas.
Luego de verificar los hechos delictivos, realizaron un análisis de la información obtenida con el objetivo de identificar a todos los integrantes del grupo y obtener pruebas suficientes para imputar los delitos.
Este tipo de dispositivos destacan por su dificultad, ya que los tres puntos de venta de drogas investigados estaban ubicados en zonas urbanas con calles estrechas y poco espacio para estacionamiento de vehículos.
Los investigadores comprobaron que los domicilios utilizados como puntos de venta de droga estaban permanentemente vigilados y utilizados para emplear ‘aguadores’ o personas apostadas en distintos puntos, en medios de transporte o a pie, cuya misión era detectar presencia policial.
Cuando estos individuos detectaron alguna sospecha, avisaron al encargado de suministrar la droga en la casa, quien la cerró y cesó la actividad ilícita.
Algunos de estos ‘aguadores’ eran los hijos más pequeños de la familia, que recorrían la zona utilizando bicicletas o patinetes para detectar cualquier tipo de amenaza a su actividad ilícita.
Los investigadores comprobaron que el grupo delictivo hizo uso de una red habitacional. Los principales servían para la venta de sustancias estupefacientes y, a su vez, eran residencia habitual de los cabecillas y sus familiares.
Además, tenían otras viviendas cercanas, algunas de ellas usurpadas, en las que vivían otros miembros de la organización criminal, quienes realizaban la venta y distribución de las sustancias, así como la vigilancia de las viviendas principales.
Cada uno de los integrantes del grupo criminal desarrollaba su actividad clara y definida dentro del organigrama.
Durante el desarrollo de la investigación, los guardias civiles han constatado un constante movimiento de personas en los inmuebles donde se distribuía la droga. Ingresaron al domicilio, permanecieron en el interior por un corto tiempo y salieron con las dosis recién adquiridas, verificando además que estas transacciones se realizaron en presencia de menores de edad del clan desmantelado.
Este tipo de actividad delictiva conlleva otras tipologías, como robos con violencia (arrastre de bolsas), robos o robos en el interior de vehículos, rompimiento de lunas de vehículos para sustraer objetos que, posteriormente, dentro del porro, eran canjeados por dosis.
INVESTIGACIÓN DEL PATRIMONIO
La Guardia Civil también ha llevado a cabo una investigación patrimonial de los integrantes del grupo criminal, en la que se ha acreditado que sus ingresos declarados no se corresponden con su nivel de vida.
Se ha detectado que, por ejemplo, el principal líder del grupo y su socio declararon que solo cobraban prestaciones sociales, mientras que en las redes sociales mostraban un alto nivel de vida y poseían varios vehículos de alta gama.
Una vez obtenidas todas las pruebas necesarias, la Benemérita ha llevado a cabo la fase de explotación de la operación, en un dispositivo formado por cincuenta personas que han llevado a cabo la entrada y registro, de forma simultánea, en tres fincas de Los Alcázares.
La operación ha culminado con la detención de una decena de personas, una de ellas menor de edad, como presuntos autores de los delitos de pertenencia a grupo criminal, tráfico de drogas, sustracción de arma de fuego, recepción y tenencia ilícita de armas.
Los investigadores han incautado más de veinte dosis de cocaína, heroína y marihuana, además de base de cocaína, instrumentos para pesar y envasar la droga, dinero en efectivo, vehículos, varias armas de fuego reales y simuladas -una de ellas robada-, municiones y múltiples armas blancas.
Puedes consultar la fuente de este artículo aquí