Las cosas no pintaban bien. La candidatura de Organismo ya fracasó la primera vez por falta de apoyo y, en este momento, las circunstancias que le obligaron a retirarse no han cambiado, y también han aparecido nuevos elementos que no le favorecen.

Para empezar, en el Eurogrupo todavía hay una Gran mayoría de ministros que militan en el Partido Popular. (PPE) y en los últimos tiempos los movimientos del PSOE no se han caracterizado por alejarse del radicalismo, sino más bien por todo lo contrario. Además, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha dilapidado un enorme capital político en Europa en cuestiones como conseguir apoyos para el reconocimiento del catalán en la UE, lo que ahora le deja sin margen de maniobra para seguir pidiendo favores a otros presidentes.

En este juego de reparto de posiciones en Europa, además, la decisión de presentar la candidatura de Carlos Corpus para liderar el Eurogrupo haría que el los socialistas perderían opciones aspirar a puestos institucionales justo ahora que en 2026 está previsto que se decida la elección del presidente del Parlamento y del presidente del Consejo, mucho más cotizados.

Por otra parte, el mandato de Luis de Guindos como vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE) finaliza la próxima primavera y aunque en Bruselas se considera poco probable que le suceda otro español, el Gobierno aún podría exprimir sus opciones para impulsar la candidatura al cargo del propio Carlos Corps.

El ministro español de Economía no estará, por tanto, en el proceso que comenzó el viernes con la presentación de candidaturas y que se resolverá en un par de semanas con la votación por mayoría simple el 11 de diciembre -en un foro dominado por los ministros del PPE-. Al día siguiente el nuevo presidente iniciará su mandato, que tendrá una duración de dos años y medio. Mientras tanto, el Ministro de Finanzas de Chipre ocupa ese cargo de forma interina.

¿Apuestas por el BCE?

El Dimisión del Gobierno de España para luchar Con la candidatura de Corpo a la Presidencia del Eurogrupo, cargo que en los últimos años ha intentado alcanzar sin éxito en dos ocasiones, una con Nadia Calviño y otra con Carlos Corpo, se alimentan los rumores cada vez más insistentes, y no sólo en los círculos financieros nacionales sino también europeos, de que el verdadero objetivo de las autoridades españolas para aumentar su influencia en las instituciones europeas es el BCE.

El Gobierno no desaprovechó el viernes la oportunidad para afirmar que a pesar de este paso atrás, «España seguirá trabajando para garantizar una presencia significativa e influyente en las principales instituciones «Políticas económicas y financieras europeas».

En las últimas semanas algunos medios de comunicación muy impregnados del ambiente bruselense, como Politico o el Financial Times, han reflexionado sobre la Posible candidatura del exgobernador del Banco de EspañaPablo Hernández de Cos, como una de las opciones más sólidas para la sustitución que se producirá en octubre de 2027 de Christine Lagarde al frente del BCE. Algo que seguramente venía circulando desde hacía unas semanas en los círculos financieros nacionales y con lo que la dirección del Banco de España llevaba más tiempo especulando.

Las posibilidades reales de éxito de su candidatura también se ven favorecidas por la Práctica desaparición de altos cargos españoles. de las principales entidades financieras europeas en las próximas semanas, por la coincidencia horaria de la salida por motivos personales de José Manuel Campa de la Presidencia de la Autoridad Bancaria Europea (EBA); y por el fin de su mandato del vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, que dejará a España sin presencia en el Comité Ejecutivo del supervisor.