Kyiv ha centrado su sabotaje en los últimos meses en la La ‘flota fantasma’ rusa encargada del transporte de petróleo procedente de Rusia, el ‘oro negro’ que Putin sigue vendiendo para financiar la invasión.

Precisamente, hace unos días, uno de esos petroleros fue atacado por Ucrania, y ahora se encuentra Varado en la costa de Bulgaria. Pese a ello, Putin ha asegurado que están «dispuestos a seguir garantizando el suministro ininterrumpido de combustible»

Antes de la guerra, los barcos griegos transportaban petróleo ruso. Sin embargo, con las sanciones, el Kremlin creó su propia ‘flota fantasma’ para eludirlas. Esta compuesto de barcos viejos, navegando sin seguro y vulnerable a los ataques ucranianos.

Además de transportar petróleo ruso, la flota fantasma está una parte fundamental en la guerra híbrida que Putin ha iniciado contra Europa. «Son embarcaciones de todo tipo para colocar drones y sabotear cables marítimos. En Dinamarca probablemente varios drones despegaron de un buque de guerra ruso y sobrevolaron aeropuertos daneses», apunta al respecto el analista militar Guillermo Pulido.

Es posible que el Kremlin haya utilizado esta táctica este jueves, cuando cinco drones fueron derribados sobre el Base de submarinos nucleares francesa.

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