¿Por qué no lo han eliminado? Por dos razones. La primera es que en las últimas semanas los esfuerzos de las empresas públicas se han centrado en afrontar las consecuencias de la DANA en Valencia.

“La prioridad es evaluar los daños en la línea de alta velocidad Madrid-Valencia”, dijeron fuentes del administrador de infraestructuras días después del 29 de octubre, cuando la DANA destruyó la infraestructura ferroviaria en Valencia. De hecho, los trabajos de Adif en la zona han permitido restablecer el tráfico ferroviario desde el pasado 14 de noviembre.

Sólo un día antes de la DANA, Adif y Renfe anunciaron que retirarían el tren descarrilado “inminentemente” y por la noche para garantizar el menor impacto posible sobre los viajeros y que los servicios de alta velocidad previstos puedan funcionar con normalidad.

Sin embargo, esa retirada no ha sido tan inminente. Fuentes del administrador de infraestructuras aseguran que “Están trabajando en ello” y que “no han dejado de hacerlo a pesar de lo ocurrido en Valencia”. Si bien es cierto, reconocen que algunas cuestiones de seguridad y la descarga de maquinaria a las vías sí sufrieron un retraso de “días” por ese motivo.

De las dos empresas públicas, Es Renfe quien toma las decisiones y coordina todo el plan ya que pertenece a la empresa pública del convoy que descarriló. Desde Renfe confirman que “ya se han iniciado los trabajos previos y en breve se iniciará el grueso del seccionamiento y desmontaje por piezas del tren”.

Cabe recordar que el incidente en este túnel supuso que Renfe tuviera que cancelar 22 trenes, lo que afectó a 18.800 viajeros. Por su parte, Ouigo canceló 13 trenes que afectaron a 5.900 pasajeros, mientras que Iryo suspendió seis y registró 18 con retrasos superiores a 60 minutos, según datos facilitados por los distintos operadores a este diario.

Plan Adif y Renfe

La segunda razón por la que el tren sigue en el túnel Se debe a la complejidad del trabajo.. Para liberar la vía afectada, el plan diseñado por Adif y Renfe incluye seccionar el tren en varias piezas, que serán extraídas del túnel progresivamente.

Esta operación supone un esfuerzo técnico y logístico sin precedentes en el sector ferroviario. Ha sido diseñado para restablecer el funcionamiento de las vías afectadas en el menor tiempo posible, priorizando, al mismo tiempo, la seguridad de los pasajeros y del personal involucrado.

Debido a la complejidad de estos trabajos, Ni la empresa ferroviaria ni el administrador de infraestructuras pueden confirmarlo. ¿Cuándo finalizarán los trabajos que comenzaron hace semanas?

En paralelo, continúa la investigación de la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios (CIAF), que calificó el accidente de “grave”. Además, se teme que el dispositivo de grabación del tren que descarriló no estuviera activado. Estamos hablando de una especie de caja negra como el de los aviones que permite conocer información como la velocidad o la ruta seguida por el convoy.