Economia

Las pymes buscan una salida al laberinto del acceso al crédito

Las pymes buscan una salida al laberinto del acceso al crédito
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  • Publishednoviembre 19, 2024



Uno de los grandes handicaps que tienen las empresas españolas para sustentar su crecimiento es el acceso al crédito. Y aunque actualmente asistimos a una mejora gradual en este aspecto, aún persisten desafíos relacionados con el aumento de los costes, el endurecimiento de las condiciones de acceso a la financiación -plazos, garantías- y la necesidad de adaptarse a las nuevas realidades económicas. «Hay muchas empresas que todavía enfrentan dificultades para acceder al crédito en sus primeras etapas por la falta de garantías o de un historial crediticio sólido», explica Raúl Mínguez, director del Servicio de Estudios de la Cámara de España. Además, “para atraer inversores privados y otro tipo de financiación alternativa, es clave que las pymes tengan un plan de negocio claro, con proyecciones financieras bien fundamentadas y objetivos de crecimiento realistas. Este plan debe demostrar el potencial de la empresa, especialmente en áreas como la innovación y la sostenibilidad. Sin embargo, diseñar este plan no está al alcance de todas las pymes, por falta de formación o dificultades para disponer de recursos y asesoramiento que les apoyen en el proceso.

La falta de un historial operativo sólido es uno de los mayores obstáculos, particularmente para startups o nuevos proyectos, explica Francisco Vidal, director de economía y políticas sectoriales de Cepyme. «Sin datos previos que avalen su viabilidad, ¿Cómo van a evaluar las instituciones financieras el riesgo crediticio? y esto restringe las oportunidades de financiación para este tipo de empresas, pese al creciente interés por promocionarlas. El tamaño de la empresa también es un factor determinante. Cuando una pequeña pyme busca acometer una gran inversión o renovación, los análisis financieros realizados por los prestamistas, basados ​​en ingresos históricos y proyecciones futuras, pueden limitar la capacidad de acceder a todo el crédito necesario. Esto reduce significativamente la viabilidad de proyectos más grandes para empresas con estructuras más modestas. Por otro lado, el sector de actividad juega un papel clave en la concesión de financiación. «Los sectores considerados cíclicos o sensibles a la incertidumbre económica enfrentan mayores dificultades para acceder al crédito, especialmente en contextos de inestabilidad o riesgo, afectando su capacidad de desarrollo y adaptación en momentos críticos».

Sin acceso a los recursos financieros necesarios, muchas pymes verían limitada su capacidad para invertir en innovación, digitalización, sostenibilidad, formación, marca, diversificación o en su expansión exterior. Llegados a este punto, explica Jordi Solé Tuyá, director ejecutivo de Kreedit, «muchas pymes no saben dónde acudir para encontrar opciones más allá de los grandes grupos bancarios y salir de ese marco es complejo. Los bancos dominantes en el mercado mantienen firmemente su posición y no No promover una apertura hacia otras alternativas de financiación que podrían estar al alcance de las pymes. A esta dificultad se suma el impacto de la pandemia, que sigue afectando a la actividad económica de muchas pymes. Estos préstamos, pensados ​​como un alivio temporal, no se han generado. un aumento de la actividad económica y hoy «muchas de estas empresas enfrentan la presión de devolver préstamos que, en su momento, sólo lograron amortiguar el impacto de la pandemia, sin contribuir realmente a su crecimiento o expansión».

Esta situación coloca a las PYMES en una posición de creciente vulnerabilidad. La falta de acceso a fuentes de financiación diversificadas y la presión de los compromisos adquiridos dibujan un panorama complejo.

Por otro lado, la financiación del capital de trabajo se vuelve fundamental para garantizar el flujo de caja necesario para mantener las operaciones diarias sin interrupciones, sostienen desde Cepyme. Este tipo de apoyo financiero permite a las empresas continuar operando y cumplir con sus compromisos, incluso en escenarios donde los plazos de pago y cobro no coinciden y juegan un papel fundamental en la estabilidad y sostenibilidad del negocio. Por ello, es crucial no olvidar las dos facetas fundamentales de la financiación: por un lado, la relacionada con la demanda y las ventas, que asegura la operatividad y el funcionamiento diario apoyando el capital de trabajo; y, por otro lado, la destinada a inversión y crecimiento, que permite ampliar el negocio y abordar proyectos de mayor envergadura.

Financiación

Actualmente, en el mercado de financiación empresarial en España operan unas cuarenta entidades privadas alternativas que pueden ofrecer servicios específicos para ellas, continúa Solé. A diferencia de los bancos tradicionales, que suelen ofrecer una amplia gama de productos (desde préstamos y pólizas de crédito hasta leasing, alquiler, financiamiento para importaciones y exportaciones y servicios como confirming y factoring), estas entidades alternativas se caracterizan por su enfoque de producto único. . Es decir, se especializa en un único tipo de financiación, como anticipos de ventas o préstamos directos. “Lo que pasa es que esta especialización supone un reto para las empresas: primero deben tener claro qué tipo de financiación necesitan y encontrar aquella que ofrezca el producto concreto que mejor se adapte a su situación particular”.

Casi dos millones de empresas necesitaron financiación el año pasado

En este sentido, señala Raúl Mínguez, el creciente interés por la diversificación ha llevado a un mayor recurso al capital privado, incluyendo inversiones de business angels, fondos de capital privado, plataformas de financiación participativa o sociedades de garantía mutua. De esta forma, se evita «la vulnerabilidad que provoca la excesiva dependencia del sector bancario con garantías específicas de difícil alcance para las pymes o las fluctuaciones y cambios en las políticas crediticias de las propias entidades».

Sectores afectados

Dadas las características del acceso al financiamiento, los sectores más vulnerables son aquellos que requieren inversiones relativamente cuantiosas y con retornos ocasionalmente sujetos a amplios márgenes de incertidumbre. En este grupo estarían algunas ramas tecnológicas (con un alto componente de I+D+i), industrial, energético o construcción/inmobiliario, señala la Cámara de Comercio. También hay que señalar la importancia dependiendo de la etapa en la que se encuentre la empresa, por lo que las startups y empresas en etapas tempranas que buscan capital para innovar y crecer rápidamente pueden verse especialmente afectadas por la dificultad para acceder a dicho crédito. . O actividades sujetas a alta competencia, con bajos márgenes, lo que aumenta la percepción de riesgo, como el comercio minorista o algunas ramas del turismo.



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