El presidente ruso, Vladímir PutinPromulgó este sábado una ley que condona deudas a quienes firmen contratos con el Ejército a partir del próximo 1 de diciembre.

Aquellos soldados, movilizados y reclutas que cumplan con un mínimo de doce meses del servicio militar, especifica la ley publicada en el portal de información jurídica del Estado ruso.

La condición para el alivio de la deuda reside en la existencia de una decisión judicial relacionada con el cobro del mismo o al inicio de un procedimiento de ejecución.

El Gobierno ucraniano considera que «una movilización de deuda«, es decir, el Kremlin deja a los ciudadanos rusos cuyas familias están endeudadas sin alternativas viables, ya que se verán obligados a renunciar a todos sus bienes para saldar sus obligaciones o para alistarse en la guerra contra Ucrania.

Esta situación demuestra una vez más que la propaganda rusa afirma que hay «pérdidas mínimas». puede que no sean del todo ciertosmás bien implican que, después de casi tres años de conflicto, Rusia enfrenta serias dificultades para reponer su ejército y recurre cada vez más a tácticas de movilización encubierta.

También serán perdonados si mueren.

En relación con los reclutados, también serán perdonados en el caso de que soldado muere en acción o es declarado inválido tras haber sido gravemente herido en combate.

Por supuesto, la deuda no podrá exceder en ningún caso los 10 millones de rublos (cerca de $100,000 al cambio actual).

El número de voluntarios que firmaron contratos con el ejército había disminuido en el primer semestre del año, pero aumentó tras la incursión ucraniana en región de kursk.

Por su parte, Rusia descartó este sábado una segunda ola de movilización de reservistas para luchar en Ucrania de cara al cuarto año de combates en el país vecino.

«Nuestros ciudadanos firman muy activamente contratos con el Ministerio de Defensa«, comentó Dmitri Peskov, portavoz presidencial, a la agencia oficial RIA Novosti.

Peskov subrayó que los voluntarios siguen cursos en los que reciben formación «concienzudamente», por lo que «ahora no hace falta hablar de movilización».

«Son muchos, cientos los que firman contratos cada día», añadió.

Las autoridades rusas, que no informan de bajas en las filas de su ejército, aunque fuentes occidentales cifran esta cifra en aproximadamente 700.000 muertos y heridos.

El Kremlin se ha abstenido de declarar una nueva movilización parcial tras la primera en septiembre de 2022 provocará un gran descontento popular y el éxodo de cientos de miles de hombres en edad militar.

Los combates en Ucrania alcanzaron los 1.000 días esta semana y las fuerzas rusas avanzaron a marchas forzadas hacia el Donbas, aunque Moscú aún no ha podido expulsar a las tropas ucranianas de Kursk.