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Los átomos de tu cuerpo viajaron por otras galaxias antes de regresar a la Vía Láctea

Los átomos de tu cuerpo viajaron por otras galaxias antes de regresar a la Vía Láctea
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  • Publishedenero 13, 2025


Un nuevo estudio revela que la mayoría de los átomos de nuestro cuerpo podrían haber pasado millones de años fuera de la galaxia, transportados por las corrientes cósmicas antes de regresar.

Antes de que nacieras, los átomos que componen tu cuerpo ya se habían embarcado en un viaje épico. Elementos como el carbono, el oxígeno y el hierro, esenciales para la vida, no sólo se forjaron en los núcleos de las estrellas, sino que también fueron expulsados ​​al espacio interestelar y, en algunos casos, incluso al espacio intergaláctico.

Los investigadores han descubierto que la materia que constituye la vida en la Tierra, incluido el carbono, ha recorrido grandes distancias en el universo, viajando en una «cinta transportadora cósmica» que recicla elementos a través del medio circungaláctico. Este proceso es clave para comprender cómo las galaxias reciclan material y forman nuevas estrellas.

La historia de tus átomos: de las estrellas al espacio profundo

La mayoría de los átomos que componen tu cuerpo fueron creados en violentos procesos cósmicos. A excepción del hidrógeno y el helio, la mayoría de los elementos se originaron en las estrellas mediante fusión nuclear o durante supernovas. Cuando estas estrellas explotan, expulsan estos elementos al espacio interestelar, donde pueden ser arrastrados fuera de la galaxia anfitriona por las corrientes cósmicas del medio circungaláctico.

En 2011, los científicos confirmaron que estas corrientes podrían expulsar de las galaxias elementos pesados ​​como el oxígeno y el hierro. Ahora, un nuevo estudio publicado en Las cartas del diario astrofísico ha demostrado que el carbono, elemento fundamental para la vida, también puede reciclarse de esta manera. Esto contradice la creencia anterior de que su peso ligero le impediría escapar al espacio intergaláctico.

El equipo de investigación utilizó datos del espectrógrafo Cosmic Origins del telescopio Hubble. Este instrumento mide cómo se altera la luz de objetos distantes, como los quásares, a su paso por el medio circungaláctico de las galaxias formadoras de estrellas. Los resultados muestran que los átomos de carbono pueden ubicarse a 400.000 años luz de su galaxia anfitriona, una distancia cuatro veces mayor que el tamaño de la Vía Láctea.

La cinta de reciclaje cósmica

El medio circungaláctico actúa como un gigantesco sistema de reciclaje en el que el material estelar es expulsado al espacio y luego absorbido de regreso a la galaxia. Según Jessica Werk, astrofísica de la Universidad de Washington y coautora del estudio, «el mismo carbono en nuestro cuerpo probablemente pasó una cantidad significativa de tiempo fuera de la galaxia».

Este sistema es crucial para la evolución de las galaxias. Las corrientes de material no sólo distribuyen los elementos esenciales para la formación de nuevas estrellas, sino que también mantienen el proceso de formación estelar. Samantha Garza, coautora del estudio, describe el entorno circungaláctico como «una gran estación de tren que empuja y tira materiales constantemente».

Además, el reciclaje de átomos no sólo afecta a las galaxias individuales, sino que también influye en el equilibrio del universo en su conjunto. Comprender cómo funciona este sistema y cuándo se detiene permitirá a los científicos descifrar cómo envejecen las galaxias y finalmente «mueren».

Somos el resultado de un universo en movimiento

La idea de que los átomos de nuestro cuerpo hayan viajado más allá de la galaxia es un ejemplo impresionante de nuestra conexión con el cosmos. Estos procesos no sólo explican cómo las galaxias reciclan la materia, sino que también nos recuerdan que somos literalmente «polvo de estrellas» que ha viajado por el universo antes de convertirse en parte de nosotros.

REFERENCIA

La encuesta CIViL*: El descubrimiento de una dicotomía C iv en el medio circungaláctico de las galaxias L*



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