Sé que habría estado orgulloso
Emilio Aragón (65 años) ha sabido mantener su vida privada en la más estricta intimidad. A pesar de su popularidad y la de su familia, ha intentado mantener a sus tres hijos alejados de los focos, Iciar (39), macarena (36) y Nacho (29). Ninguno de ellos ha seguido el legado de la saga, aunque en los últimos tiempos, gracias a las redes sociales, han conseguido una mayor repercusión mediática.
IciarPor ejemplo, encontré un espacio en Instagram después de convertirse en madre. Hoy tiene cuatro hijos, pero cuando inició la maternidad vio un hueco en las redes. Se explicó con total naturalidad y empezó a compartir los retos de esta etapa. La acogida ha sido un éxito. Ahora tiene casi 90.000 seguidores y está representada por una conocida agencia de publicidad. personas influyentes y colabora con marcas de prestigio. Al mismo tiempo, cabe recordar, dirige su propia empresa.
Hija primogénita de Emilio Aragón y Aruca Fernández-Vega (64) es propietario de una panadería que ha ganado popularidad en los últimos tiempos. Un proyecto conseguido gracias a la vena emprendedora que le viene de su herencia, tal y como recordó en una entrevista reciente.
Ichi, como lo conocen en su entorno, no siguió el camino artístico de la familia Aragón, pero sí sus ganas de realizar proyectos ilusionantes. «I Soy emprendedor gracias a mi padre y mi abuelo.. Es lo que chupo en casa desde pequeña. Todo lo que he visto en la tele, en las funciones del circo… El esfuerzo, lo que hicieron… Y cómo estuvieron todo el día pensando e intrigando. Al final es lo que quería hacer», afirmó la empresaria en El patio BYGun proyecto de la organización What Really Matters.
Tras estas palabras, Icíar Aragón fue preguntada por su infancia, siendo hija de Emilio Aragón y nieta de la recordada Miliki, de Los payasos de la televisión. «Mi padre siempre quiso que tuviéramos una vida súper normal.. De hecho, Siempre nos ha protegido, mucho, de los medios. y la exposición. Para él, su vida íntima siempre ha sido muy privada. Y hemos vivido una vida, entre comillas, muy parecida a la de cualquier otra persona», afirmó.
En esta misma línea ha enumerado los valores que se lleva de casa: “Humildad, esfuerzo y trabajo”. Agradecida por el ejemplo que ha tenido desde niña expresó: «Lo que he vivido mucho es el esfuerzo y el tirar para adelante todo el día«.
Gracias a esta educación, los consejos de su familia y sus propias ganas de superación, Icíar Aragón ha conseguido compaginar con éxito una empresa, la empresa de su marido, su trabajo en las redes sociales y la maternidad. una serie de proyectos que su abuelo Miliki habría visto con entusiasmo.
«¿Pudo presenciar parte de tu emprendimiento?» preguntaron a Icíar, siguiendo la línea de éxitos de su familia. A esto, la empresaria respondió al borde de las lágrimas. “Me voy a emocionar. El otro día me mandaron un vídeo de mi abuelo hablando del día que escribió. habia una vez un circoque sólo le salió en formato vals. He escuchado esa anécdota mil veces. Pero Habían pasado tantos años desde que escuché su voz hablar normalmente.…»
«Acabo de subir un historia en Instagram que decía: ‘Que pena que mi abuelo perdiera a mis hijos. (…) Todo lo que estoy construyendo Ahora… Y sé que él Me habría sentido súper orgulloso’«, respondió emocionada. Fue en ese momento que recordó que Miliki, como ella, tenía una pastelería en Puerto Rico.
Aunque Icíar Aragón ha optado por el camino empresarial, al final de la charla reconoció que También observó con interés el sector televisivo. «Me hubiera encantado, pero por circunstancias de la vida… Creo que mi padre siempre quiso protegernos de la exposición. y del mundo de la televisión… Pero en Instagram he encontrado mi nicho y mi vena como actriz», confesó.
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