Sálvame era duro, pero vosotros vais de…
Belén Esteban lo tiene claro: Sálvame era duro, pero «hacíamos las preguntas que la gente quería escuchar». Con estas palabras ha hecho un duro alegato a favor del programa en el que trabajó durante 14 años y que le ha dado tantas alegrías como desgracias. La colaboradora ha cargado contra «De viernes», el programa de los viernes por la noche que se vende como un formato de «periodismo amable».
Para Belén Esteban nada diferencia lo que hacen los compañeros de «De viernes» a lo que hacía ella en «Sálvame Delux». Considera que en el nuevo programa de Telecinco, que acaba de cumplir un año con buenos datos de audiencia. van de «programa nuevo, bonito y blanco» y nada más lejos de la realidad. La Esteban argumenta: «Yo he tenido que escuchar en este programa nuevo como un hijo decía que su madre le metía orfidales en el biberón y que quería dar a entender una relación en vez de madre de otra cosa». Les reta y les dice que si quieren presumir y comprarse con Sálvame, solo espera que «estéis 14 años como hemos estado nosotros».
Hay muchas personas que opinan igual que Belén Esteban y la ayudan con otros argumentos: «Sálvame eran gamberros y De viernes van de formales pero con el mismo objetivo».
Belén Esteban trabaja en la actualidad en Ni que fuéramos con otros compañeros de Sálvame como María Patiño, Kiko Hernández o Kiko Matamoros. Todo ellos se quedaron sin trabajo cuando la cadena decidió cancelar Sálvame tras una importante pérdida de audiencia. Telecinco decidió entonces apostar por formatos más amables y menos controvertidos. La parrilla cambió radicalmente. Tanto es así que la propia Ana Rosa Quintana, considerada la reina de las mañanas de la cadena, pasó a hacer un programa por la tarde para intentar competir con el formato vespertino de Antena 3, capitaneado por Sonsóles Ónega.
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