El Ejército baraja la opción del obús gigante Némesis de Santa Bárbara para renovar su artillería móvil
No hay actualmente en el mundo un obús autopropulsado de mayor volumen; tampoco más rápido y con más potencia de fuego. Y aparece en el mercado del rearme impulsado por dos detalles no menores en el paisaje. Uno: la guerra de Ucrania ha revalorizado la artillería hasta ponerla en un primer nivel estratégico parecido al de la I Guerra Mundial; y dos: no pocos ejércitos occidentales tienen armas parecidas con 40 o más años de antigüedad.
Su imponente tamaño pudo influir en el nombre que ha recibido, Némesis, pero en Santa Bárbara Sistemas explica su director general, Juan Antonio Escriña, que, entre otras acepciones de la palabra, les vale bien la del nombre de la diosa griega que restaura el orden.
General Dynamics European Land Systems, la matriz de la española Santa Bárbara, ha aprovechado la Feria Internacional de Defensa y Seguridad (FEINDEF) para presentar en Madrid el más grande y potente de sus productos, un obús sobre cadenas capaz de disparar en movimiento proyectiles de 155 mm, el calibre OTAN mayor, a 70 kilómetros de distancia.
Esta arma es «una opción para España», comentan a este diario fuentes el Ejército, que confirman que se baraja como opción desde poco después de que se supiera de su fabricación. En Santa Bárbara son prudentes: confirman que han informado y mostrado a Defensa el nuevo producto, pero cuentan que no ha habido tiempo de profundizar en el contacto.
Soberanía europea
Una cosa es el Ejército y otra el ministerio de Defensa. Las fuentes consultadas en el arma de Artillería ven con buenos ojos que aparezca «una alternativa a los M109, que, por otra parte, no tendrían por qué dejar de estar en servicio», comenta un alto oficial. Se refiere a las ocho decenas de obuses autopropulsados de fabricación americana actualmente operativos, y que forman el grueso de la artillería móvil de campaña del Ejército. Defensa comenzó un proceso de renovación… en el que también ha participado Santa Bárbara.
El ministerio escucha la opinión técnica y las certificaciones de los militares, pero atiende también a razones políticas. Entre otras, que lo que compra cree empleo y deje conocimiento industrial en España, una línea roja para el Gobierno.
Obus némesis autopropulsado / GDELS
También las hay económicas: valorar el precio de estas plataformas que, según fuentes del sector, pueden rondar entre los 8 y los 10 millones de euros, dependiendo de los sistemas que incorpore y del volumen de la compra.
A la hora de presentar el Némesis, Santa Bárbara ha subrayado los rasgos de españolidad -y europeidad- del vehículo: barcaza de una plataforma ASCOD fabricada en Trubia (Asturias), tubo artillero del sistema AGM 115/52 creado en Alemania y arma, vehículo y sistemas integrados en Alcalá de Guadaíra.
“La soberanía industrial europea en este producto está garantizada”, corrobora Anna Montuenga, jefa de ingeniería del producto. Para su empresa, el enorme obús -con el volante a tres metros de altura- es una metáfora del perfil español que, en estos tiempos de controversia, promesas de inversión y proyectos cruzados en la industria de defensa, trata de mostrar Santa Bárbara tras las repetidas invectivas que ha lanzado contra la compañía el presidente de Indra, Ángel Escribano, después de intentar en vano comprársela a los norteamericanos de General Dynamics.
Por dentro
No hay en el mercado un obús autopropulsado capaz de alcanzar objetivos tan lejos y con una cadencia de ocho disparos en un minuto, evitar el fuego contrabatería por estar en movimiento, y también de servir de pieza de artillería de costa en ciertos escenarios. El Némesis, que corre sobre cadenas no metálicas a hasta 70 kilómetros por hora, lleva detrás, aparte, toda la munición, proyectiles que entran en el ánima del cañón automáticamente y que se pueden sumar como carga de pago de hasta 20 toneladas a las 20 toneladas de peso en vacío del vehículo.
Delante, en una amplia cabina de mando, hay sitio para dos o tres soldados, la dotación del Némesis, sus armas individuales, sus mochilas, joysticjks de gobierno y varias pantallas rugerizadas para control e imágenes de cámaras de distintos tipos. Arriba, en el techo, puede incorporar sistemas de defensa del vehículo.
Ingeniería Anna Montuenga, en la cabina de conducción de la autopropulsada cómo / José Luis Roca
Los vehículos del mismo segmento del Ejército, los obuses móviles M109 americanos, entraron en servicio en España en los años 70. «Siguen siendo un arma extraordinaria pese a su edad», dice una de las fuentes militares mencionadas, pero apenas tienen 25 kilómetros de alcance.
Ha llegado a haber 102 en funcionamiento en España, en un entorno en el que países como Italia y Marruecos tienen más de 200. Algo más de 80 M109 españoles están ahora en un proceso de renovación. La artillería de campaña española incorpora nuevos tubos para los M109 y sistemas de mando y control de los artilleros, pero en Defensa existe el plan de abordar tarde o temprano la sustitución de los elementos más antiguos, y ampliar la artillería de campaña; también la de la Infantería de Marína, que usa estas armas.
Visión de la cámara infrarroja en la cabina de la némesis obú autopropulsada. / José Luis Roca
Uno de los 31 proyectos de innovación diseñados por la Secretaría de Estado de Defensa aborda esta carencia de artillería, con la posible compra de 100 obuses sobre cadenas y una docena sobre ruedas. Con el proyecto de lanzacohetes SILAM rodeado de incógnitas por la mala relación con Israel -su sistema de lanzamiento es de la israelí Elbit Systems-, se hace aún más apremiante la renovación.
No obstante, sobre ese plan no se saben más detalles en la industria, ni acaso el alcance final de la inversión. Iba a celebrarse una reunión del sector con Defensa, pero se suspendió por el apagón.
Por el Némesis han mostrado también su interés Suiza -que tiene más de 200 M109 algo anticuados- y algunos clientes bálticos de GDELS.
Suscríbete para continuar leyendo
Puedes consultar la fuente de este artículo aquí