Kiko Rivera e Irene Rosales trataron de salvar su relación con un fallido viaje a Mérida
Kiko Rivera e Irene Rosales intentaron poner fin a sus problemas en un viaje a Mérida durante las últimas Navidades que compartieron juntos.
Irene Rosales y Kiko Rivera confirmaron su ruptura hace apenas unas semanas. Tras 11 años de relación, el hijo de Isabel Pantoja confesó que su vida junto al creador de contenidos había llegado a su fin. Poco después de hacerse pública la noticia se publicaron unas imágenes de Irene Rosales con un chico que levantaron sospechas de una posible infidelidad.
Después de todo tipo de especulaciones, Irene decidió salir al frente y explicar los verdaderos motivos de la separación: «No ha habido ningún motivo concreto ni de peso». Según el creador de contenido, la ruptura se debe a que la relación se ha enfriado por ambas partes: «Nos llevó a una rutina y una monotonía en la que ya no éramos felices». Irene también destacó que no pasar tiempo juntos por el trabajo de Kiko tampoco habría facilitado la situación: «Él tiene trabajo y pasa mucho tiempo fuera de casa. hice todo solo «, confesó la influencer.
la ultima oportunidad
Esta falta de tiempo juntos llevó a la pareja a realizar un último viaje con la esperanza de solucionar sus problemas matrimoniales. Según desvela la colaboradora de ‘Vaya Fama’ Almudena del Pozo, Kiko e Irene viajaron a Mérida las pasadas Navidades de 2024 en un intento fallido de reavivar su relación : «Después de ese viaje se dan cuenta de que las cosas estaban peor de lo que pensaban «.
La historia de Kiko Rivera en Instagram | Fotografía: TelecincoPor su parte, Kiko ha respondido a las imágenes de su ahora expareja con una indirecta a través de las redes sociales. El hijo de Isabel Pantoja subió una foto de las dos hijas que tiene en común con Irene acompañada de un breve texto: «Mi prioridad absoluta, sin más». Al parecer, con esta publicación, el DJ estaría intentando lanzarle una indirecta a la madre de las niñas.
Irene no se ha pronunciado sobre estas indirectas, pero lo que sí ha querido destacar es que aunque ella y Guillermo, el dueño de una empresa de césped artificial, se están conociendo, de momento no son mas que amigosy ha asegurado que durante su matrimonio con Kiko nunca ha estado con otra persona: «Es totalmente falso que le haya sido infiel a Kiko en estos 11 años».
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