La justicia le da la razón: este trabajador consigue cobrar una pensión de más de 1.656 euros a sus 56 años de edad pese al rechazo de la Seguridad Social
Un trabajador ha conseguido cobrar una pensión de aproximadamente 1.656,52 euros a los 56 años. En primera instancia, el Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) rechazó su solicitud alegando un incumplimiento de los requisitos necesarios para cobrar la prestación. Sin embargo, tras recurrir su caso al Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), conseguiría la concesión de esta ayuda.
[–>[–>[–>Se le ha reconocido su derecho a recibir la prestación anticipada con el 55% de la base reguladora de una pensión de 3.011,86 euros. El trabajador, que llevaba 25 años cotizados desde su ingreso en la empresa en 1997, tras padecer una grave dolencia en la espalda que le dificultaba sensiblemente su trabajo, habría obtenido la pensión de incapacidad permanente total.
[–> [–>[–>En este sentido, el demandante había sido diagnosticado con una discopatía degenerativa lumbar y hernia discal, y en vista de su improbable mejora, decidió solicitar la jubilación permanente anticipada por incapacidad en 2022. Según figura en la sentencia STSJ M 16034/2024, su solicitud fue denegada y se cuestionó si el trabajador se merecía este derecho.
[–>[–>[–>
Cómo fue el proceso legislativo detrás
[–>[–>[–>
En primer lugar, la Seguridad Social denegó su solicitud. Tras esto, el afectado decidiría acudir a los tribunales, alegando una situación física y psicológica incompatible con la actividad laboral. Con todo ello; el Juzgado de lo Social número 6 de Madrid, tras revisar informes médicos, determinó que el trabajador tenía derecho a la incapacidad permanente total.
[–>[–>[–>La causa de esta decisión fue que el trabajador no podría desempeñar su profesión habitual al tener que permanecer de pie durante largos intervalos de tiempo. Pese a todo, el demandante decidió recurrir de nuevo al TSJM solicitando el grado de incapacidad absoluto en lugar del total. Sin embargo, la Sala desestimaría el recurso considerando que aún podía llevar a cabo algunos trabajos más sencillos.
[–>[–>[–>
Finalmente, la Seguridad Social le denegó la incapacidad absoluta (con la que cobraría el 100%), por lo que tuvo que conformarse con una incapacidad permanente total y cobrar el 55% de la base reguladora de una pensión de 3.011,86 euros mensuales. A efectos prácticos, el trabajador estaría cobrando el equivalente a 1.656,52 euros desde el 11 de junio de 2022.
[–>[–>
[–>Qué grados de incapacidad permanente existen
[–>[–>[–>
Según establece el propio INSS, se perciben distintos tipos de incapacidad permanente laboral, detallados en la carta de resolución del INSS que se envía al trabajador una vez que el tribunal médico ha evaluado su caso. En este caso, se distinguen cuatro grados de incapacidad permanente:
[–>[–>[–>
- Incapacidad Permanente Parcial: Una disminución de al menos el 33% en la capacidad para realizar el trabajo habitual, pero que no imposibilita el desempeño en este mismo.
- Incapacidad Permanente Total: Impediría realizar la profesión habitual, pero no cualquier otro tipo de trabajo.
- Incapacidad Permanente Absoluta: Imposibilita el desempeño de cualquier tipo de trabajo.
- Gran Invalidez: Es la situación más grave, en la que a la incapacidad absoluta se le suma la ayuda de una tercera persona para realizar las tareas esenciales de la vida diaria.
Las regulaciones establecen que, antes de recibir la carta de resolución, el usuario tendrá que haber pasado revisión por el EVI (Equipo de Valoración de Incapacidades), también conocido como Tribunal Médico. Este paso se convierte en un trámite fundamental para poder optar a una carta de resolución de incapacidad permanente favorable.
[–>[–>[–>
En general, a la hora de solicitar estas prestaciones, uno nunca debe crearse falsas expectativas, ya que el INSS no acostumbra a aceptar solicitudes de incapacidad a la primera, a menos que hablemos de enfermedades de grave y con secuelas incapacitantes. Es por todo ello que debes justificar adecuadamente las especificaciones médicas que son requeridas para acceder a los distintos tipos de prestaciones de incapacidad permanente.
[–>[–>[–>
Puedes consultar la fuente de este artículo aquí