PALMA 9 de noviembre (EUROPA PRESS) –

Este domingo, la Policía Nacional pidió colaboración para localizar a propietarios de puertas y contraventanas afectados por un español detenido en Palma por cobrar por adelantado unos trabajos de barnizado que le encargaron y que nunca realizó.

En este sentido, la Policía ha compartido una imagen de las puertas y persianas que fueron incautadas al presunto estafador y cuyos propietarios aún no han podido ser localizados.

La investigación sigue abierta y, hasta el momento, el número de víctimas contabilizadas asciende a 30 y el importe defraudado ronda los 40.000 euros.

Hay que recordar que la Policía Nacional informó el pasado 9 de octubre, en un comunicado de prensa, de la detención de un español como presunto autor de un delito de estafa, amenazas graves y denuncia judicial, por lo que fue enviado a prisión por la autoridad judicial.

Según informa la Jefatura Superior, la operación del Grupo de Delitos Económicos y Delitos Tecnológicos de la Policía Nacional se inició hace unos meses tras recibir múltiples denuncias por fraude, con un modus operandi común y un mismo autor.

De estas denuncias, los agentes conocieron que un hombre se anunciaba en portales de internet y chats de mensajería telefónica, utilizando el nombre de empresas solventes, para realizar trabajos de lacado y barnizado de puertas y ventanas a un precio muy inferior al de mercado.

Luego de contactar a las víctimas, el presunto autor inició una conversación con ellas, acordaron un precio y recogieron de las viviendas los elementos a reparar.

En el momento de la retirada de los efectos solicitó un anticipo de la mitad del presupuesto total y entregó un ‘recibo’ a las víctimas en algunos de los casos, aunque en otros no aportó ningún tipo de documento como comprobante del pago. Luego de esto, informó a los perjudicados que en un corto período de tiempo estarían terminadas las obras.

Posteriormente, según la Policía, el presunto autor se puso en contacto con sus víctimas pocos días después de recoger los efectos y les solicitó más dinero del inicialmente acordado.

Para ello, utilizó dos estrategias. O puso la excusa de que tenía que comprar más material del inicialmente acordado o dijo que tenía que entregar los efectos a un carpintero para su reparación y posterior barnizado.

Por otro lado, utilizó la excusa de alquilar un local para realizar la obra, para lo cual necesitaba un anticipo de una cantidad de dinero indeterminada. Para generar confianza, ofreció a las víctimas la posibilidad de reducir el coste final entre 200 y 300 euros respecto a lo acordado inicialmente.

El presunto autor incluso envió a las víctimas fotografías de su documentación personal con el afán de generar tranquilidad y obtener el dinero solicitado.

Cuando llegó el plazo de entrega, el presunto autor se puso en contacto con las víctimas y acordaron fecha y hora de entrega, aunque en ningún momento se hizo efectiva la entrega del material ya que el presunto autor dejó de atender llamadas y mensajes.

Transcurridos varios meses más del plazo inicialmente pactado para la entrega de los efectos, el detenido se volvió agresivo y tuvo una actitud engreída hacia las víctimas. Incluso los amenazó con agredirlos físicamente a ellos o a sus familiares y pidió más dinero para darles los trabajos.

Tras varias vías de investigación y tras las pesquisas realizadas por los agentes del grupo de delincuencia económica, se consiguió la total identificación y localización del presunto autor, en una finca de la zona norte de Mallorca, donde finalmente fue detenido.