MADRID, 20 de noviembre (EUROPA PRESS)-

El Servicio Estatal de Emergencias de Ucrania informó este jueves de la muerte de al menos 26 personas a causa del ataque ruso de la víspera a la ciudad de Ternopil, en el oeste de Ucrania, mientras continúa la búsqueda de desaparecidos.

La ciudad de Ternopil fue escenario este miércoles de parte de un ataque ruso a gran escala contra el oeste de Ucrania, que afectó a otras regiones como Ivano-Frankivsk, o Lviv, en respuesta, según Moscú, a la ofensiva ucraniana del martes con misiles estadounidenses contra instalaciones civiles en Voronezh.

Los equipos de rescate han retirado más de 700 metros cuadrados de escombros en un contexto de gran peligro por el mal estado de las estructuras que apenas han quedado en pie tras ser alcanzadas por drones rusos, así como por la necesidad de tener que trabajar manualmente en varias zonas afectadas.

«Tenemos mucho trabajo por delante. Lo principal es encontrar a todos los que puedan estar bajo los escombros», afirmó el ministro del Interior ucraniano, Igor Klimenko, quien detalló que entre los 26 muertos hay tres menores, además de otros 93 heridos.

Klimenko ha informado de que gran parte de los fallecidos fallecieron a causa de los incendios provocados por los impactos de los proyectiles. «Las llamas se extendieron rápidamente y cubrieron las casas con una ola de fuego. La gente intentó saltar por las ventanas aterrorizada», afirmó el Ministro del Interior.

Mientras tanto, los ataques rusos continuaron anoche en lugares como Dnipropetrovsk, Kherson, Donetsk, Sumi y Kharkiv. Las fuerzas ucranianas han afirmado haber repelido 106 de los 136 drones que registraron durante la tarde del miércoles y toda la noche de ayer.