la condena al fiscal general del Estado complica el panorama político socialista
El ex fiscal general del estado, Álvaro García Ortizestá en el foco de los medios tras su condena por revelar datos confidenciales de Alberto González Amadornovio del presidente de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Pero la polémica no gira sólo en torno al condenado. Después de una semana muy tensa, la situación se complica para el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Por su parte, el Partido Popular ha salido al ataque asegurando que «en democracia, quien abusa de su poder acaba siendo condenado», explicó el líder ‘popular’. Alberto Núñez Feijóo. Por su parte, Ayuso sostuvo que «la Justicia ha condenado a un Fiscal General del Estado por cometer un delito con el único objetivo de agredir y perjudicar a un adversario político», hechos que son, según la madrileña, «propios de una dictadura».
Mientras tanto, el ‘número dos’ del PP nacional, Miguel Telladocalificó a García Ortiz de «delincuente» porque «así lo ha determinado la Corte Suprema» y «porque alguien» le pidió «que cometiera un delito».
Sánchez, sin palabras
Pese a que el líder socialista defendió con uñas y dientes al exfiscal hace dos semanas, cuando afirmó que «la verdad» acabaría «imponiéndose». no se ha vuelto a hablar al respecto, aunque sí dijo algunas palabras que podrían ser mensajes velados.
«Hoy, viendo lo que está pasando en nuestras sociedades, más que nunca necesitamos valentía. La democracia es un privilegio que debemos defender cada día», afirmó Sánchez tras el anuncio de la sentencia. A su vez, dijo que debemos defender la democracia de «ataques que están cambiando de forma, de abusos de poder» y reivindicó su deseo «de neutralizar esa amenaza».
Por si fuera poco, el PSOE también afrontó esta semana las últimas informaciones sobre Leire Díez. También conocida como el fontanero del PSOE, Díez declaró este lunes ante el juez y negó todo lo que la involucraba en el presunto complot contra la UCO. Así, aseguró que no se reconoce en los audios en los que se presenta como la «mano derecha» de Santos Cerdán, ya libre, y defendió que es periodista y que estaba investigando.
Al mismo tiempo que avanzan los expedientes en los casos que afectan al hermano y a la mujer del presidente, el socialista aseguró que en cada caso han colaborado con la Justicia: «Hay que dejar que la Justicia trabaje».
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