de la rinoplastia al bótox, pasando por el busto
La docuserie de atresplayer’Los Borbones: una familia real‘ aborda en este cuarto capítulo cómo la llegada de Letizia Ortíz a la familia monárquica y cómo se quería convertir poco a poco a encajar en el ideal de princesa que gran parte de la sociedad tenía presente.
Una parte del transformaciones lo que necesitaba para amoldarse a esa imagen, lo hicieron pasar por quirófano en más de una ocasión. El documental rescata de la hemeroteca la noticia de un informativo de Antena 3 en la que se informaba quey había retocado el tabique nasal. «Creo que quería rectificarse la nariz porque tenia una nariz muy prominente en la parte aquí. Me pareció normal porque le afeaba un poco el perfil, no de frente, porque es una chica muy linda, pero la hacía ver bastante fea. Entonces decidió operarse», afirma. Carmen Enríquez en esta producción.
Pero su nariz no fue lo único que cambió con el paso de los años. La peor etapa personal de Letizia está marcada por la obsesión por estar a la altura de su ambición y encajar a la fuerza en ese molde. El documental analiza estas operaciones, desde rinoplastia, mentoplastia, levantamiento de senos o ácido hialurónico hasta bichectomía o Botox.
Un vía crucis estético para contrarrestar la hiperexposición a los medios.
«Lo que pasa es que yo creo que el problema de las operaciones es que están adictivo. Y lo que me parece es que la reina Letizia No necesitó tantos retoques, es una mujer muy bonita.. Porque, además, a quienes se retocan, al final a todos les queda la misma cara o muy parecida. Y cuando los ves de cerca, el aspecto de su piel también es un poco ceroso«dice Enríquez.
*Ya disponible ‘Los Borbones: una familia real’ en atresplayer.com
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