Las garantías de seguridad a Ucrania por parte de Europa y su coordinación con EE.UU. han sido el eje fundamental de una nueva reunión de la coalición de voluntarios que reúne a los aliados de Kiev este jueves en París, presidida en una videoconferencia por el dúo Macron-Starmer, que se ha organizado casi inesperadamente tres días después de la reunión que mantuvieron con ellos en Londres junto con el canciller alemán, Friedrich Merz, y el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky.

De hecho, el propio Merz ha anunciado simultáneamente desde Berlín que se ha enviado una propuesta sobre las concesiones territoriales que Ucrania está dispuesta a hacer para lograr la paz a Donald Trump, quien la víspera había dicho por teléfono a los líderes europeos que no estaba dispuesto a «perder más tiempo» para llegar a un acuerdo para poner fin a la guerra.

Horas antes, Trump acababa de acusar a la Unión Europea de ser un grupo de países en decadencia liderados por “gente débil” y volvió a criticar a Zelensky. El presidente ucraniano ha dicho que está dispuesto a celebrar elecciones (una demanda clave de Moscú y ahora de Washington) si Estados Unidos y los aliados europeos de Kiev pueden garantizar la seguridad de las elecciones. Zelensky especificó un plazo potencial de dos o tres meses, pero hay varios obstáculos que superar. Algo que también ha estado sobre la mesa este jueves en la reunión de la Coalición de voluntarios en París.

Según la publicación estadounidense Axios, Ucrania respondió este miércoles a la propuesta de paz de 20 puntos impulsada por la administración Trump tras revisiones realizadas en diversas reuniones con sus emisarios por separado con ucranianos y rusos a un documento inicial que contenía 28 puntos e incluía varias exigencias máximas del Kremlin.

Zelensky precisó este jueves que el control de la región de Donetsk y de la central nuclear de Zaporizhia son los 2 principales puntos pendientes para llegar a un acuerdo de paz. El presidente también ha anunciado en su último discurso a la nación que mantendrá la próxima semana nuevas reuniones bilaterales con socios europeos para seguir dando forma a los documentos que definirán los pasos para poner fin a la guerra y fortalecer Kiev tras el conflicto.

La Coalición de los Dispuestos, creada el pasado mes de marzo tras la desastrosa reunión en la Oficina Oval entre Trump y Zelensky, inicialmente sólo reunió a unos pocos países, como Gran Bretaña y Francia. Al principio había muy pocos voluntarios, pero ahora esta coalición reúne a casi una treintena de naciones y empieza a tener peso.

Algunos expertos en seguridad franceses creen que se puede esperar que Hasta 26 estados participan en un sistema de garantía de seguridad para Ucrania.lo que implicará tropas en la frontera y, posiblemente, medidas navales o aéreas. Este año, Francia y el Reino Unido han encabezado llamados para enviar tropas sobre el terreno a la Ucrania de posguerra, una medida que ha dividido profundamente a los aliados occidentales. Suecia, Dinamarca y Australia se han mostrado abiertos a ello, mientras que Polonia, Grecia e Italia se han opuesto, aunque en algunos casos hay una evolución en los matices de una posible participación sobre el terreno.