Una veintena de diputados republicanos con peso en el Capitolio enviaron este jueves una carta al secretario del Tesoro estadounidense. Scott Bessent, instándolo a evaluar si incluir España en la lista negra de países al considerar que el Gobierno de Pedro Sánchez está llevando a cabo o promoviendo un boicot internacional contra Israel.

Los congresistas conservadores, según explican en la carta, basan esta petición expresa en la prohibición de importación y exportación de material, productos y tecnología de doble uso de defensa con Israel aprobada por el Gobierno el pasado mes de septiembre como respuesta al «genocidio en Gaza», además del veto de entrada en España de barcos y aviones con armamento destinado al Ejército de Benjamín Netanyahu o el tránsito de combustible por puertos y espacio aéreo.

También detallan que el pasado mes de septiembre el Gobierno prohibió el tránsito de un cargamento de armas americanas a Israel a través de nuestras bases en Rota y Morón de la Frontera.

La carta advierte de que estas políticas fomentan la discriminación económica contra el país de Oriente Medio y, además, generan inseguridad jurídica a las empresas americanas que operan en España.

La inclusión de España en la lista negra del boicot a Israel dependería de Hacienda. El proceso puede iniciarse siempre que el Departamento haya recibido una denuncia de las empresas afectadas o una solicitud del Ejecutivo o del Congreso, como en este caso, aunque no es necesaria su aprobación en la Cámara de Representantes ni una orden ejecutiva del presidente.

El Departamento que dirige Bessent es el encargado de evaluar si Un gobierno extranjero está exigiendo, promoviendo o condicionando actividades comerciales que supongan la participación en un boicot internacional contra Israel considerado ilegal por la legislación estadounidense, a través del estudio de la legislación aprobada por el Ejecutivo -en este caso el español- o de las prácticas llevadas a cabo.

¿Qué significaría?

España sería el primer país europeo y aliado occidental de EE.UU. en entrar en esta lista, ya que actualmente está formada únicamente por países árabes que en algún momento han puesto obstáculos a las relaciones comerciales de Israel, entre ellos Irak, Kuwait, Líbano, Libia, Arabia Saudita, Siria, Yemen, Qatar y Emiratos Árabes Unidos.

Entrar en la lista negra del boicot a Israel conduciría a Posibles sanciones a empresas y ciudadanos estadounidenses que operen en España imponiendo demandas legales y fiscales para evitar que se alineen, en su opinión, con el intento de aislamiento económico y comercial de Israel.

Para ello, los republicanos se basan en la enmienda Ribicoff, un instrumento legal que forma parte de la Ley Fiscal de 1976 bajo el cual Estados Unidos puede imponer sanciones a empresas que participen en boicots internacionales contra Israel con la idea de garantizar que las empresas estadounidenses no se vean obligadas a participar en estas presiones comerciales.

Aunque no supondría ninguna sanción directa contra España, sí afectaría a su posición internacional.

Un paso en un momento delicado

La entrada de España en esta lista sería un movimiento sensible para las relaciones entre Madrid y Washington, después de que un portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos afirmara las medidas adoptadas por el Gobierno de Pedro Sánchez «envalentonar a los terroristas» de Hamás.

La diplomacia estadounidense calificó de «profundamente preocupante» que España elegirừLimitaremos potencialmente las operaciones estadounidenses y daremos la espalda a Israel el mismo día en que seis personas fueron asesinadas en Jerusalén».

La tensión en las relaciones comerciales entre ambos países también se ha visto condicionada por la negativa de Sánchez a aumentar el gasto en defensa al 5% del PIB español: Trump ha atacado reiteradamente la gestión del líder socialista por su negativa en este asunto, amenazando incluso con expulsar a España de la OTAN o aumentar sus aranceles.

besadoEl jefe del departamento que estudiaría la propuesta republicana, ya advirtió a Sánchez por sus acercamientos a China ante el proteccionismo comercial de la Administración de Donald Trump: «Sería como degollarse», dijo.

Asimismo, las relaciones diplomáticas con Israel también están en la cuerda floja desde que Sánchez reconoció a Palestina como Estado independiente en mayo de 2024.

España ha prohibido la entrada a dos de los ministros de Benjamín Netanyahu, los ultraderechistas Bezalel Smotrich e Itamar Ben Gvir, después de que el Gobierno hebreo vetara el acceso a su país de la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, y de la ministra de Infancia y Juventud, Sira Rego.