GRANADA 19 de diciembre (PRENSA EUROPA) –

La Guardia Civil ha finalizado, con la operación denominada ManilaFire, una investigación que se ha saldado con cuatro detenidos y ha permitido esclarecer un incendio intencionado de un inmueble de Santa Fe, en el área metropolitana de Granada, con una residente en su interior, que se saldó con lesiones que pusieron en peligro su vida, así como desarticular un grupo criminal que venía operando de forma ininterrumpida en la zona con, entre otros delitos que se investigan, extorsión a personas vulnerables y tráfico de drogas.

En nota de prensa, la Guardia Civil ha informado este viernes de que los detenidos fueron puestos a disposición judicial este pasado jueves, tras lo que quedaron en libertad con cargos, así como con prohibición de acercarse a las víctimas. Las llamas se habrían originado tras el lanzamiento intencionado de un artefacto incendiario desde el exterior de la vivienda, lo que provocó la rápida propagación del fuego.

La intervención inmediata de los servicios de emergencia fue decisiva para rescatar a la víctima y evitar consecuencias aún más trágicas. En paralelo y desde el primer momento, la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Granada activó un dispositivo de investigación especializado.

Este dispositivo permitió “determinar que este hecho no fue aislado, sino que estuvo relacionado con la actividad de un grupo criminal radicado en la localidad, dedicado a la comisión de múltiples delitos de especial gravedad”. Entre los hechos investigados se encuentran amenazas reiteradas, coacciones, agresiones físicas, extorsiones (principalmente a personas con un perfil vulnerable), delitos contra la seguridad colectiva y contra la propiedad, generando «un clima de intimidación y miedo entre los vecinos».

El desarrollo de la investigación también permitió comprobar la implicación de este grupo en actividades relacionadas con el narcotráfico. Durante los registros realizados en el marco del operativo, los agentes incautaron diversas cantidades de sustancias estupefacientes, preparadas para su distribución, así como distintos elementos peligrosos para la vida e integridad física de las personas, como municiones para armas cortas, machetes, cuchillos y una Taser.

Como resultado de la Operación ManilaFire, tres hombres, de edades comprendidas entre 20 y 43 años, han sido detenidos como presuntos responsables de los delitos de tentativa de homicidio, extorsión, incendio domiciliario, amenazas, pertenencia a grupo criminal y otros delitos conexos.

También ha sido detenida una mujer de 39 años, pareja de uno de los detenidos, como presunta responsable de dos delitos de extorsión, detención ilegal, robo de vehículo, pertenencia a grupo criminal y contra la salud pública.