Los planes inmobiliarios del actual duque de Alba, Carlos Fitz-James Stuart Martínez de Irujo y, sobre todo, de su hijo Fernando Fitz-James Stuart, el duque de Huéscar, último heredero de la casa ducal, asustan a los vecinos de la Calle Manuel y calle Duque de Liria.

ambos tienen en mente hacer pisos turisticos en el edificio que puebla la manzana de esas dos calles, compuesto por cinco portales y propiedad de la Casa de Alba. O al menos eso es lo que la gente cree. alrededor de 75 familias que pueblan la manzana.

Según El País, algunos de los vecinos -entre 40 y 50- he recibido una carta en forma de correo ordinario que ha enviado el nuevo directivo, una sociedad llamada Bala Investment que se creó en mayo de 2025 y está presidida por Enrique Dancausa Treviño, hermano de Concepción Dancausa Treviño, que fue consejera de Familia, Juventud y Política Social de la Comunidad de Madrid con Isabel Díaz Ayuso.

La carta, que según el diario, está firmada por el director general, Javier Zarrabeitia, afirma que «por motivos técnicos y de rehabilitación del edificio«, los contratos de alquiler no se renovarán cuando expiren y se invita a los inquilinos a salir de manera «ordenada» en los próximos meses.

Según contaron los vecinos al diario, los vecinos ya tenían miedo de ser desalojados. Sobre todo después de conocer que el año pasado la Casa de Alba inició una proceso de renovación de otro edificio históricotambién su propiedad, junto al Palacio de Liria, para reconvertir su uso en apartamentos turísticos que serán gestionados por José María Aznar Botella, hijo de José María Aznar.

Para esta operación fue necesario aprobar un urbanismo especial y específico a dicho edificio por el Ayuntamiento de Madrid. Cuenta El País que los números 3, 5 y 7 de la calle Manuel, y 4 y 6 de la calle Duque de Liria han sido siempre propiedad de la Casa de Alba.

En muchas ocasiones, señalan, los inquilinos eran los mayordomos, cocineros o el propio personal del Palacio de Liria. Estas propiedades van desde los 45 a los 90 metros cuadrados, con uno, dos y tres dormitorios.

El alquiler actual es, dependiendo de la vivienda, entre 1.000 y 1.500 eurosmuy por debajo del precio de mercado de la zona. Según explicó un vecino a El País, «lo que hemos recibido es que están buscando convertirlo en residencia de estudiantes o apartamentos turísticos, la propuesta de rehabilitar el edificio va en esa dirección. Cualquier otra cosa no tiene sentido».

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