En 2025, más de 3.000 personas murieron intentando llegar a nuestras costas a bordo de embarcaciones irregulares, según el informe “Seguimiento al Derecho a la Vida 2025”, del grupo Ca-minando Fronteras, que constata un aumento de los naufragios. La ruta atlántica hacia Canarias es una de las más peligrosas del mundo y la más transitada de los últimos años, pero en 2025 fue superada en tránsito por la ruta argelina, que también duplicó la mortalidad respecto al año anterior y se contabilizaron 1.037 víctimas en 121 tragedias marítimas.

La ruta atlántica hacia Canarias sigue siendo la más mortífera, con 1.906 víctimasaunque este año se ha producido un descenso en el número de llegadas y, por tanto, también de tragedias. Existen diferentes rutas según el punto de salida de los barcos, la travesía migratoria en la costa entre Agadir y Dakhla todavía es utilizada principalmente por personas que viajan en embarcaciones neumáticas.

La carretera de Mauritania sigue siendo la que tiene mayor número de víctimasy es frecuentado por poblaciones originarias del Sahel y África Occidental. La mayoría de personas que utilizan la travesía desde las costas senegalesas son senegaleses, pero en los últimos meses también se han interceptado gambianos, aunque también es otra ruta marítima hacia Canarias. En 2025 surgirá una nueva ruta migratoria desde Guinea Conakry, un recorrido de más de 2.000 kilómetros, que se ha convertido en un punto de salida estratégico para los cayucos.

Las razones de estas muertes

Helena Maleno, coordinadora de esta investigación, afirma que: “La reducción del número total de personas asesinadas en las fronteras no es consecuencia de una mejor protección del derecho a la vida”. A pesar de este descenso estadístico, hay un aumento en el número de tragedias, porque muchas rutas actuales utilizan embarcaciones con menos personas a bordo, lo que fragmenta las cifras sin reducir la mortalidad. Al mismo tiempo, observamos un aumento de los intentos de llegada y de los episodios mortales.en particular en la ruta de Argelia y en los pasos a nado hacia Ceuta, así como la apertura de nuevas rutas cada vez más largas, remotas y peligrosas, que exponen a las personas a riesgos extremos.

Desde 2007, el Colectivo Ca-minando Fronteras gestiona una línea telefónica de alerta operativa las 24 horas del día, los 365 días del año y gracias a él reciben alertas de personas en peligro en las fronteras, de barcos en peligro en el mar y de familiares de migrantes.

El informe concluye que las muertes y desapariciones se deben a una activación insuficiente de los sistemas de emergencia. y subcontratando el control y la gestión de fronteras a terceros países.

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