Descarbonizar para preservar el planeta
Vivimos un momento clave en el que la transición energética marcará el futuro inmediato y, a tenor de lo expuesto por profesionales y expertos del sector, no será solo cuestión de innovación técnica, sino de voluntad política, planificación estable, transparencia institucional y compromiso ciudadano. Así se desgranó en una jornada organizada por EL PERIÓDICO y ‘activos’ y celebrada en el Recinto Modernista de Sant Pau el 16 de julio, titulada Descarbonización de la demanda: el rol de las energías renovables (gas y electricidad).
«El mayor reto que tenemos como sociedad es el cambio climático», afirmó Joaquim Daura, presidente del Clúster de la Energía Eficiente de Catalunya y director de gestión activa de la energía en Schneider Electric Iberia, que defendió la sostenibilidad como clave de competitividad. Destacó que el 80% de las emisiones tiene origen energético. Y expuso el caso de éxito de Schneider, «escogida como la empresa más sostenible del mundo», con una «hoja de ruta» clara, liderazgo transversal y digitalización: «Descarbonización sin digitalización es absolutamente imposible», recalcó. Su receta: eficiencia, electrificación e implicación de los proveedores.
Varios caminos
«La electrificación es clave, pero no suficiente para alcanzar la neutralidad», advirtió Rubén Martínez Burgal, responsable de gases renovables de la Zona Este en Naturgy, que puso el foco en el papel fundamental del biometano. Pese a que España tiene un gran potencial –«podríamos descarbonizar todas las casas catalanas», dijo–, solo hay 15 plantas operativas. «El biometano es igual que el gas natural», afirmó, para destacar a continuación que no es necesario cambiar calderas ni cocinas. Asimismo, reclamó «crear un sistema de incentivos y obligaciones a la demanda» para desarrollar el sector.
La primera mesa redonda reunió a expertos que analizaron el presente y futuro del sector eléctrico renovable en Catalunya, y puso el foco en autoconsumo, almacenamiento y flexibilidad. Bajo la moderación de Javier Muñoz, director de comunicación de APPA Renovables, se centró en la electricidad renovable y en sus aplicaciones prácticas. Arrancó el debate Belén López Flores, directora de Energías Renovables en Nostrum Group, quien destacó que el real decreto ley 7/2025 es «una oportunidad inmejorable para acelerar la transición energética», especialmente ampliando el plazo para grandes proyectos y mejorando la regulación del almacenamiento, esencial para superar los obstáculos actuales.
Por su parte, Cristina Corchero, CTO and Founder de Bamboo Energy, subrayó el papel clave de la digitalización en la flexibilidad eléctrica: «Flexibilidad no es consumir menos, es consumir mejor», permitiendo a la industria ajustar su demanda para maximizar energías renovables sin afectar la producción, apuntó.
Para el gerente regional de Quántica Renovables, Xavier Olivella, la nueva regulación «es una oportunidad inmejorable para impulsar la aceleración de la transición energética y obviamente los proyectos del autoconsumo colectivo, del almacenamiento». De hecho, los ponentes coincidieron en que la regulación y la innovación tecnológica serán decisivas para cumplir los ambiciosos objetivos de almacenamiento energético planteados para 2030, abriendo un futuro prometedor para la electrificación verde en Catalunya.
En una mesa redonda marcada por la visión estratégica, Corchero apuntó que «una gestión inteligente del almacenamiento puede aumentar su rendimiento el 35%», abriendo la puerta a nuevos ingresos mediante la participación en mercados de ajuste, como sucede en Portugal y Francia. Por su parte, López incidió en que «se puede hacer en España, aunque el modelo regulatorio aún es frágil», por lo que la estabilidad normativa será clave. En este punto, Olivella defendió el modelo APPA como herramienta transformadora: «En instalaciones industriales, los retornos se sitúan entre los 2 y 4 años»
El debate se abrió a la resiliencia de las redes, urgencia compartida, alertando que hay algunas casi obsoletas que deben reforzarse para lograr un crecimiento sostenible. La electrificación y la distribución eficiente se perfilan como retos inmediatos para alcanzar los objetivos del PNIEC y garantizar el papel activo de los autoconsumidores.
Lecciones del apagón
A raíz del apagón del 28 de abril, Olivella vio una «oportunidad para despertar conciencias»: las peticiones de baterías se han multiplicado por 20, evidenciando una red obsoleta que amenaza proyectos clave como el coche eléctrico, destacó. Corchero insistió en «una gestión inteligente del sistema energético» y en la necesidad de «pedagogía industrial», para que sectores como el agrícola y el automovilístico comprendan los beneficios de electrificar sus procesos. La electrificación permite ahorros sustanciales: «Más de 1.400 euros anuales por hogar», según destacó Muñoz. Por su parte, López subrayó que, pese a los beneficios evidentes, «las empresas necesitan ayudas y financiación para acometer inversiones». La mesa coincidió en que la seguridad jurídica, una red robusta y un modelo normativo estable serán esenciales para que la electrificación industrial avance. Los incentivos fiscales y financieros, junto con campañas divulgativas, se dibujan como las herramientas más eficaces.
Descarbonización en edificación y transporte
La descarbonización de los sectores de la edificación y el transporte se dibujó como un proceso necesario, compartido y urgente en la segunda mesa redonda, que fue moderada por Iván Capdevila, director de ERF Wattega y coordinador del Grupo de Trabajo de Edificación en Edificación Sostenible del Clúster de la Energía Eficiente de Catalunya. Los ponentes coincidieron en que el impulso debe surgir de la ciudadanía, acompañado por normativas claras, avances tecnológicos y una gobernanza eficiente.
Santi Martínez Farrero, presidente de L’Energètica, fue rotundo al afirmar que «cada kilovatio hora (kWh) generado con fósiles debe eliminarse», denunciando los relatos que blanquean la energía nuclear y llamando a la pedagogía pública. Por su parte, David Serrano, director corporativo y de sistema de gestión integrada de Port Olímpic, defendió una «transición desde el propósito» y alertó que «las olas de calor afectan directamente a la vida ciudadana». También puso en valor proyectos tractores como el Bicing, los mil puntos de recarga en Barcelona y la electrificación náutica del Port Olímpic.
Desde ICAEN, la responsable de la Unidad de Edificios, Ainhoa Mata, explicó que «el 75% del parque edificatorio de la UE es ineficiente» y recordó que para 2050 «todos los edificios deberán ser de cero emisiones». Reivindicó ayudas escalonadas para la rehabilitación y destacó el papel de la comunicación: «Como pedimos hipotecas, deberíamos poder financiar rehabilitaciones paso a paso», concluyó.
Vehículos eléctricos
En el transporte, el director de Márketing y Sostenibilidad de Ader, Joan Lluís Rubio, remarcó el reto de electrificar una flota flexible: «El profesional aún duda sobre invertir en un vehículo eléctrico», sostuvo, pero presentó como caso de éxito el reparto con IKEA, «gracias a pedagogía, tecnología y reconfiguración operativa».
La responsable comercial del segmento de edificios de Schneider Electric, Maria Carmona, recalcó que «cualquier transición en el siglo XXI debe ir de la mano de la digitalización» y puso como ejemplo la Fábrica Cero CO2, que logró ser neutra en emisiones. La gestión inteligente de la energía fue clave, con «microgrids, baterías y autoconsumo que permiten usar la fuente más beneficiosa en cada momento», expuso.
Antes de concluir el acto, tomó la palabra Joan Herrera, socio-fundador de SAMSO, quien advirtió que «hay que pensar out of the box». Defendió modelos energéticos próximos al consumo y propuso reformas normativas y fiscales. «Hoy podríamos ahorrar 1.447 millones al año y evitar inversiones innecesarias en red», destacó.
Para cerrar la jornada, la directora del ICAEN, Anna Camp, subrayó que «estamos en un momento clave de la transición energética». «Tenemos planificación, pero falta acelerar», concluyó.
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