Funcionarios de la Oficina de Investigaciones de Corrupción de Altos Funcionarios (CIO) y la policía entraron este viernes en la residencia presidencial en Seúl para ejecutar la orden de arresto temporal contra el expresidente surcoreanoYoon Suk-yeol, por su imposición de la ley marcial.

«Hemos comenzado a ejecutar una orden de arresto contra el presidente Yoon», afirmó el CIO en un comunicado después de que los seguidores del presidente tuvieran que ser dispersados ​​la víspera tras intentar bloquear el acceso a la residencia presidencial.

la agencia Yonhap informó que el equipo que ingresó al complejo, conformado por algunos 30 miembros del CIO y unos 120 policíasmantiene un enfrentamiento con una unidad militar que se cree pertenece al Comando de Defensa de la Capital (única unidad de las Fuerzas Armadas que responde directamente al jefe de Estado), dentro del recinto.

Desde hace días, cientos de acólitos de Yoon permanecen en los alrededores de la residencia presidencial en el barrio de Hannam, asegurando que No permitirán la detención del presidente y acusar al Parlamento, controlado por la oposición y que destituyó al presidente el 14 de diciembre mediante la ley marcial, de ser el resultado de elecciones amañadas.

Muchos han señalado que la ejecución de la orden, obtenida el martes por los investigadores después de que Yoon ignorara tres citaciones para declarar a causa del estado de emergencia, podría llegar hoy, ya que expira el lunes y se espera que se complete el fin de semana. El número de seguidores del presidente fuera de la residencia aumenta, complicando las operaciones.

Los abogados de Yoon han solicitado una orden judicial para anular la orden de arresto argumentando que sólo la Fiscalía puede solicitar ese tipo de detención, y han insistido en que es «ilegal» tras conocer que las autoridades se encontraban dentro del local.

Los abogados habían advertido de enfrentamientos con el servicio de seguridad presidencial si se intentaba arrestar al presidente, el primero en Corea del Sur en ser arrestado mientras aún estaba en el cargo.

En caso de que puedan arrestarlo, el equipo conjunto formado por el CIO, la policía y el Ministerio de Defensa Nacional tiene 48 horas para interrogar a Yoon e incluso solicitar una orden de prórroga de la detención si lo creen necesario.

Yoon, a quien se le ha prohibido salir del país, se encuentra, tras su destitución parlamentaria, a la espera de que el Tribunal Constitucional decida de aquí a junio si lo restablece o lo cesa definitivamente.