los socialistas no apoyan la Gran Coalición contra la ultraderecha
El canciller federal en funciones de Austria, el conservador Karl Nehammeranunció este sábado que dimitirá en los próximos días, tanto como jefe del Gobierno como a la presidencia del Partido Popular (ÖVP)después de que esta formación hubiera abandonado las negociaciones con los socialdemócratas para formar un nuevo Gobierno.
«Ponemos fin a las negociaciones con el SPÖ (Partido Socialdemócrata) y no los continuaremos», declaró Nehammer en un mensaje publicado en las redes sociales, antes de anunciar su intención de abandonar los cargos que ocupa desde diciembre de 2021.
El intento de formar gobierno en Austria ha fracasado, dejando a la oposición partido ultranacionalista FPÖvencedor de las elecciones legislativas del 29 de septiembre con el 28,8% de los votos, seguido por el ÖVP (26,3%) y el SPÖ (21,1%). Más atrás se encuentran el partido liberal Neos (8,8%) y Los Verdes (8,7%).
Para Austria, una etapa de inestabilidad políticaya que a más de tres meses de las elecciones legislativas el país aún no tiene perspectivas de tener un nuevo Gobierno y no se descarta que sea necesario convocar nuevas elecciones.
Las últimas encuestas sitúan al ÖVP y al SPÖ con una ventaja intención de voto de alrededor del 20-21% cada uno, mientras que el FPÖ de extrema derecha, que ganó las elecciones con un 28,8%, ha aumentado aún más su ventaja, hasta el 35-37%.
Después de esas elecciones, el presidente del país, el progresista Van der BellenDescartó conceder al FPÖ el mandato para formar gobierno -a pesar de su victoria- porque carecía de socios para una mayoría parlamentaria y confió el mandato a Nehammer, que inició negociaciones con los socialdemócratas.
Poco después, en noviembre, también invitó al pequeño partido neos (neoliberal) para obtener una mayoría mayor de escaños parlamentarios.
Este viernes, la líder de Neos, Beate Meinl-Reisinger, anunció que su partido abandonaba las negociaciones porque no había sido posible llegar a un acuerdo con el ÖVP y el SPÖ. en cuestiones clave porque no quieren afrontar reformas profundas del Estado a pesar de la difícil situación económica.
En un vídeo publicado en su cuenta. incógnitaNehammer ha lamentado la salida de los Neos del grupo negociador y ha destacado que, pese a ello, su partido se ha vuelto a reunir hoy con los socialdemócratas en una «nueva ronda de negociaciones», que, sin embargo, finalmente abandonó al darse cuenta de que no sería posible un acuerdo.
«Hasta ahora lo hemos probado todo. «No es posible llegar a un acuerdo sobre puntos clave, por lo que no tiene sentido para un futuro positivo para Austria (…) Las negociaciones han terminado y no se reanudarán», afirmó la canciller saliente.
«Evidentemente, en el SPÖ han triunfado las fuerzas destructivas, enemigas de la economía y de la competitividad», acusó el político conservador, reiterando su categórico rechazo a aceptar ciertas demandas de los socialdemócratas, como la introducción de impuestos sobre sucesiones y sobre la propiedad.
Por su parte, el líder de los socialdemócratas, Andrés Babler, confirmó la ruptura de las negociaciones, que atribuyó a presiones internas del partido de Nehammer desde el ala favorable a aliarse con los ultranacionalistas, al tiempo que se mostró convencido de que «las cuestiones pendientes» podrían haberse resuelto.
El fracaso del intento de formar un Gobierno estable sin los radicales «es una mala noticia para nuestro país», declaró Babler en una rueda de prensa en Viena, recordando que el Ejecutivo saliente, formado por el ÖVP y los Verdes (ecólogos), ha abandonado «un agujero presupuestario de 18 mil millones de euros.»
Según Babler, los conservadores habrían exigido “recortes en las pensiones, en los (salarios de) profesores, policías y profesionales de la salud” para reducir el déficit.
De momento se desconoce la fecha exacta en la que Nehammer dejará sus cargos y por quién será sustituido.
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