te montan de pequeño en un tiovivo, das unas vueltas y te bajas; pero eso no quita que el respeto a los demás está por encima de todo”


La nostalgia está de moda. En tiempos complicados, mirar hacia atrás nos hace pensar que antes las cosas eran más sencillas. Quizás si pudiéramos volver atrás, habríamos hecho las cosas de otra manera. Fernando Aramburuescritor, admite que incluso él, que tiene una estoico de la vida, se descubre a si mismo mirar al pasadode vez en cuando, con cierta nostalgia.
Pero el escritor revela en una entrevista para ÉticaNo te dejes llevar por esta emoción esquiva. Porque la nostalgia solo sirve anclarnos en un pasado que ya no existey nos aleja de lo que podemos hacer en el presente.
Una idea muy estoica de la vida.
«No soy unamuniano», dijo Aramburu, «no tengo el sentimiento trágico de la vida. No creo que si Dios no existe, debamos inventarlo». El escritor vasco admite que su forma de concebir la vida es mucho más cercana a la de los estoicos, quienes No perdieron mucho tiempo preguntándose por qué sucedieron las cosas.o lamentar el pasado.
«Tengo una idea de la vida como un carrusel. Cuando eras niño te subían a un tiovivo, das unas cuantas vueltas y te bajas». Ésa es mi idea, una idea un tanto estoica de la vida.» continúa el escritor. Y así, sin pensarlo mucho, nos deja una hermosa lección de vida.
Para Aramburu, como nos explicaron los estoicos, no hay por qué lamentar lo que no podemos controlar. Lo que pasó moldeó nuestro carácter.. Las desgracias nos han convertido en lo que somos. Y lamentar que hayan sucedido es como pensar que nuestras vidas serían mejores si nunca tuviéramos que crecer.
En el En la vida pasan cosas buenas y malas, Se toman buenas y malas decisiones. Pero lo realmente importante es la actitud con el que afrontamos cada una de las circunstancias que nos depara la vida. Cada una de las vueltas de este tiovivo del que nos habla el escritor.
estoicismo moral
Fernando Aramburu continúa su reflexión con una frase imprescindible para entender el estoicismo. Y en el siglo XXI, Parece que hemos olvidado su mensaje más esencial e importante.
Ser estoico, explica, no le priva de “Sé un hombre moral”. De lo contrario. “Me parece que hay que jugar las cartas de la vida de la mejor manera posible, sin dañar a los demás”, afirma el escritor.
De hecho, moralidad y estoicismo No sólo no son incompatibles, sino que Originalmente son inseparables.
Lo que muchos gurús pseudoestoicos del momento olvidan es que para Séneca, Marco Aurelio o Epicteto existía una condición inalterable que todos los estoicos debían cumplir. Si todo lo que está fuera de la actitud no pudiera controlarse, Esto siempre debe regirse por cuatro virtudes.. Sin ellos no hay estoicismo.
Las cuatro virtudes del estoicismo
Los estoicos, como Aramburu, veían la misión del estoicismo como vivir la vida con un eje moral inquebrantable.. El estoico no se doblegó a las circunstancias.no permitió que el miedo, el anhelo, el resentimiento, los celos o la envidia lo desviaran del camino de la rectitud.
Este camino, que consideraban imprescindible para vivir bien, ser felices y sentirse realizados, se configuró con cuatro virtudes cardinales.
- Coraje. El estoico tuvo que ser valiente para, incluso en las circunstancias más adversas, elegir el camino de la virtud.
- Justicia. Otro valor fundamental del estoicismo es la justicia. El estoico nunca debe actuar contra la justicia, cometiendo una falta contra sus iguales. Y no debía permanecer en silencio ante ella, porque vivir en un mundo justo era su tarea principal.
- Templanza. Defender la justicia requiere no sólo valentía, sino también templanza. El estoico no debe ser impulsivo, ni dejarse llevar por emociones intensas. Hay que moderar lo que se siente para tomar siempre la decisión más justa y valiente.
- Sabiduría. Finalmente, los estoicos se regían por el principio de la sabiduría, que permite diferenciar el bien del mal, el justo del injusto, el valiente del cobarde, la templanza de la impulsividad. Y por supuesto, lo que podemos controlar y lo que queda fuera de nuestro control.
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