Un muerto y varios heridos en un atentado en la ciudad israelí de Haifa
La tensión sigue al alza en Oriente Próximo. Este lunes un hombre ha muerto en la ciudad israelí norteña de Haifa como víctima de un atentado. A su vez, dos palestinos han perdido la vida tras el ataque de un dron israelí en Rafah, en el sur de la Franja de Gaza. También una bebé de tres meses ha muerto asfixiada en el norte de la Cisjordania ocupada, en el campo de refugiados de Yenín, después de que el Ejército israelí lanzara gas lacrimógeno. Tras el bloqueo del acceso de la ayuda humanitaria a Gaza por parte del primer ministro israelí Binyamín Netanyahu, el enviado estadounidense a la región, Steve Witkoff, plantea otras alternativas.
La mañana del lunes, un hombre israelí se ha acercado a la estación central de Haifa, en el norte de Israel, y ha empezado a apuñalar a los transeúntes. Los equipos de emergencia médica de Magen David Adom han declarado muerto a un hombre de 70 años en el lugar. También han anunciado que están brindado tratamiento a cuatro pacientes más, tres de los cuales están en estado grave. El atacante ha sido abatido por un guardia de seguridad armado. La semana pasada, el jueves, otro ataque de estas características dejó 13 heridos a 50 kilómetros del atentado de este lunes.
También la misma mañana del lunes, dos palestinos han sido asesinados por un dron del Ejército israelí en el centro de la ciudad de Rafah, en el sur del enclave palestino. El ataque sigue a una serie de agresiones mortales en el sur de Gaza el día anterior, incluido uno que mató a una mujer en Jan Younis. Esta es sólo una de las violaciones que han tenido lugar durante la primera fase del acuerdo de alto el fuego, que expiró el sábado. Al menos 116 personas han sido asesinadas durante los últimos 42 días, incluidas algunas que intentaban regresar a sus hogares como parte de la tregua acordada entre Israel y Hamás.
Incertidumbre en Gaza
Además, en las últimas horas de este domingo, una bebé de apenas tres meses ha muerto tras resultar asfixiada por gases lacrimógenos lanzados por el Ejército israelí a la entrada del campo de refugiados de Yenín. Pese al traslado de la pequeña a un centro hospitalario, la Media Luna Roja Palestina ha confirmado a la agencia de noticias Wafa que no han podido hacer nada para salvarle la vida. Desde la entrada en vigor de la tregua en Gaza, los soldados israelíes han lanzado una brutal campaña militar contra el norte de la Cisjordania ocupada que culminó con el anuncio la semana pasada del ministro de Defensa, Israel Katz, del desplazamiento forzoso de 40.000 palestinos y la permanencia de sus tropas en los campos del norte durante todo el 2025.
En Gaza, la incertidumbre ha vuelto a dominar a la población. La llegada del Ramadán ha coincidido con la expiración de la primera fase del alto el fuego acordado entre Hamás e Israel. Esta primera etapa tenía que durar 42 días y, a partir de su 16ª jornada, las partes debían empezar a negociar la segunda fase, que incluye la entrega de más rehenes y la retirada de las tropas israelíes del territorio gazatí. Pero eso no ha ocurrido debido a la negativa del Gobierno israelí para iniciar las negociaciones. Ahora, Israel está presionando para que Hamás acepte la prórroga de la primera fase, es decir, que siga liberando cautivos sin que Tel Aviv se comprometa a retirar sus tropas de la tierra palestina.
Propuesta de Witkoff
Ante la falta de acuerdo, el enviado del presidente estadounidense Donald Trump para Oriente Próximo, Steve Witkoff, ha propuesto un nuevo marco que incluye la liberación de la mitad de los rehenes retenidos por Hamás en una sola fase el primer día del nuevo acuerdo y la liberación de los cautivos restantes solo después de alcanzar un acuerdo más tarde en la segunda etapa, según han dicho altos funcionarios israelíes al medio israelí ‘Haaretz’. Israel se ha mostrado dispuesto a prolongar el alto el fuego en Gaza durante unos días, bajo la presión de la administración Trump y de los países mediadores. No obstante, Israel aceptará llevar a cabo estas negociaciones sólo sobre la base del marco propuesto por Witkoff.
Mientras, Netanyahu ha vuelto a utilizar la ayuda humanitaria como arma, al anunciar el bloqueo de su acceso a la Franja este fin de semana justo al inicio del Ramadán. El Gobierno israelí quiere presionar a Hamás para que acepte la prolongación de la primera fase del acuerdo sin comprometerse a negociar la segunda etapa.
El grupo palestino considera qeu, con esa medida, Israel «evita comprometerse a poner fin a la guerra», según dijo este sábado su portavoz Hazem Qassem en una entrevista con el canal ‘Al Araby’. «Afirmamos nuestra determinación de completar las etapas restantes del acuerdo que conducen a un alto el fuego global y permanente, la retirada completa de las fuerzas de ocupación de la Franja de Gaza, la reconstrucción y el levantamiento del asedio», ha reiterado.
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