Una vacuna experimental podría ser el fin de las alergias y ya se está probando
Para cientos de millones de personas en todo el mundo, el simple hecho de comer es una actividad peligrosa. Un trozo de maní en la salsa, un poco de marisco en el caldo o incluso un beso de alguien que acaba de ingerir el alérgeno pueden provocar problemas de salud muy graves. Amenaza de reacciones alérgicas, reacción alérgica grave y puede ser fatal, presente en la vida de muchas personas.
Hasta el momento, lo único que pueden hacer es evitar comer estos alimentos y llevar consigo una jeringa de epinefrina por si los ingieren accidentalmente. Pero la ciencia está a punto de cambiar eso.
La noticia surge de un nuevo estudio recogido por Science nuevos científicosque revela el desarrollo de una vacuna experimental que ha prevenido con éxito reacciones alérgicas durante al menos un año. Aunque el resultado todavía es en etapa preclínicaes tan prometedor que los expertos ya afirman que revolucionará el tratamiento de las alergias.
El estudio, dirigido por Laurent Reber del Instituto de Enfermedades Infecciosas e Inflamación de Toulouse, Francia, muestra que es posible entrenar al cuerpo para bloquear las moléculas que desencadenan reacciones alérgicas. Esto proporciona una protección eficaz y duradera y elimina la necesidad de que los pacientes utilicen medicamentos e inyecciones baratos.
¿Cómo funcionan las vacunas?
La culpable de estas reacciones alérgicas graves (hinchazón de garganta, dificultad para respirar y presión arterial baja) es una molécula producida por nuestro sistema inmunológico llamada Inmunoglobulina E (Inmunoglobulina E). En las personas con alergias, esta molécula reacciona de forma exagerada a sustancias inofensivas, lo que pone al cuerpo en modo de emergencia.
Actualmente existen tratamientos como el omalizumab, un anticuerpo monoclonal que se une a la IgE y bloquea su respuesta. El problema es que es un medicamento costoso que requiere inyecciones cada pocas semanas, posiblemente durante toda la vida. La propuesta de Francia es completamente diferente. Quieren desarrollar una vacuna, Llamado IgE-K.
Y su funcionamiento fue exitoso. La vacuna prepara al sistema inmunológico para producir sus propios anticuerpos IgE. Es decir, el cuerpo aprende a neutralizar las moléculas que causan alergias antes de que se unan a las células inmunes y desaten el caos.
«Queríamos encontrar una solución a largo plazo porque cuando tienes una alergia alimentaria puedes estar expuesto accidentalmente a los alimentos en cualquier momento, por lo que quieres estar protegido en todo momento», explicó Reber en declaraciones a los medios británicos.
En las pruebas realizadas, los investigadores utilizaron ratones genéticamente modificados para producir una versión humana de IgE. Los resultados mostraron que después de sólo dos dosis de la vacuna, los ratones Producir anticuerpos neutralizantes.. Los animales vacunados quedaron completamente protegidos de reacciones alérgicas cuando posteriormente fueron expuestos a sustancias que deberían haber causado una reacción fatal. Y lo más impresionante es que la protección duró al menos un año sin efectos nocivos.
¿Es este método seguro?
Una de las grandes dudas que surge al manipular el sistema inmunológico es si bloqueando la IgE salimos del cuerpo. Sin defensa contra otras amenazas. Para poner esto en contexto, debemos entender que la IgE es un sistema diseñado para protegernos de toxinas, venenos y ciertos parásitos intestinales.
Estos datos son muy tranquilizadores, ya que el equipo de investigadores los verificó con precisión para respaldar la seguridad de la vacuna. Descubrieron que no afectaba en absoluto la capacidad del cuerpo para combatir otras infecciones. Además, las personas que actualmente toman medicamentos como omalizumab para combatir alergias graves niegan haber experimentado efectos secundarios o haberse vuelto más susceptibles a otras afecciones.
Preguntas clave sobre las nuevas vacunas contra la alergia Se trata de una vacuna experimental diseñada para eliminar el origen del problema haciendo que el propio sistema inmunológico produzca anticuerpos contra la inmunoglobulina E (IgE), una molécula que desencadena reacciones alérgicas graves. En pruebas con ratones, este efecto protector duró un año.
Sí, porque no afecta a otras infecciones.
¿Qué es la vacuna IgE-K y cómo funciona?
¿Qué nivel de protección proporciona y cuánto dura?
¿Es esta una forma segura de tratar las alergias?
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