Este martes ha llegado el día que tanto llevaba esperando. Marc Márquez. El ocho veces campeón del mundo se ha puesto el mono rojo de Ducati para competir en las pruebas de postemporada de MotoGP en Montmeló.

El de Ilerda ha probado el Desmosedici GP25la moto que pilotará Borgo Paniale la próxima temporada y que promete ser la más potente de la parrilla.

Lo hizo menos de 48 horas después de despedirse del GP23 con el que montó en Gresini y con el que fue inferior en prestaciones respecto a la GP24 que han utilizado Jorge Martín y Pecco Bagnaia.

Si ya había diferencia entre ambos, comparando 2023 con 2025, Márquez ha notado una distancia notable entre uno y otro.

Esto ha sido confirmado Davide Tardozzi, Director del equipo Ducati, tras recibir las primeras impresiones de Cervera.

«Marc nos dijo inmediatamente que la moto de 2025 es más fácil de conducir.«dijo el italiano. Y esto es sólo el comienzo.