El Comité de Expertos instituido por el Ministerio de Trabajo ya ha concluido su informe sobre la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) para 2025 y, según confirman a LA RAZÓN fuentes cercanas a este colectivo, estará entre una horquilla del 3,4 % y 4,4%, lo que supondría un incremento de entre 38 y 50 euros respecto a los 1.134 euros por 14 pagos en los que se sitúa actualmente, lo que supondría un mínimo de 1.172,5 euros al mes y un máximo de 1.184 euros.

Con el veredicto de los expertos sobre la mesa, el Ministerio de Trabajo convocará de inmediato a patronal y sindicatos para abordar la subida definitiva, aunque la negociación se presume complicada. Las cifras de los expertos están muy por debajo de las exigencias sindicales y tampoco convencen a los empresarios.

Fuentes empresariales apuntan a un nuevo aspecto negativo. Recuerdan que el salario mínimo ha aumentado un 54% en los últimos siete años y «evidentemente, los resultados de las empresas -especialmente las pymes- no han crecido en la misma proporción». Tampoco las contrataciones públicas, que mantienen congeladas sus tarifas desde hace casi una década y que el Gobierno de Pedro Sánchez se niega a indexar con la subida del SMI o del IPC.

Además, otras circunstancias impiden un posible acuerdo que podrían firmar las patronales CEOE y Cepyme: «No se tiene en cuenta la brecha que se ha generado entre sectores y comunidades autónomas; Ni siquiera se respeta la subida del IPC, lo suben sin ningún criterio lógico; Las pymes y autónomos se ven perjudicados, porque los trabajadores del SMI no están en las grandes empresas ni en las medianas ni en el Ibex, por lo que se ataca a la parte más vulnerable del tejido empresarial y la que más está sufriendo; se impone un aumento intemporal sin tener en cuenta la situación empresarial; e incluso no se respeta el artículo 27 del Estatuto de los Trabajadores, que así lo determina claramente», insisten.

Cepyme también advierte de que una nueva subida «incrementaría el SMI en varias comarcas por encima del 60% del salario medio, provocaría que en las pequeñas empresas alcanzara el 70% y en algunos territorios superaría el 80% de la media provincial».

Pero los sindicatos tienen otra visión. El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, dejó claro esta semana que su sindicato propondrá en la mesa de diálogo social un aumento para 2025 de entre el 5% y el 6%, y que su línea roja de negociación estaría por encima del 4%. %, mientras que el secretario general de CC OO, Unai Sordo, opta por una subida que «equivalga a la de los salarios medios» y siempre «por encima del IPC».

El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, volvió a mostrarse más prudente, manteniendo una guerra total con Yolanda Díaz por la reducción de jornada y ampliando su impugnación al SMI, tras asegurar que la apuesta del Gobierno se centra en el incremento «que acompaña al resto de la economía y la evolución de los salarios», por lo que se mantiene en el 60% del salario medio.

El acuerdo entre los expertos se alcanzó a última hora del miércoles, acogiéndose a los parámetros que marca la Carta Social Europea, que establece que se debe aplicar una renta mínima que no pierda poder adquisitivo y no sea inferior al 60% de la media. salario.

Hasta el momento, CEOE y Cepyme sólo han firmado la subida de 2020, cuando pasó de 900 a 950 euros mensuales. A partir de ahí, el Ministerio de Trabajo sólo ha pactado subidas con CC OO y UGT: en 2024 lo hizo un 5%, de 1.080 euros mensuales a 1.134 euros; en 2023 subió un 8%; y tampoco avaló las de 2022 y 2021. En los últimos siete años, el SMI ha experimentado un incremento del 54%, pasando de los 736 euros de 2018 a los 1.134 actuales.