Escala la crisis entre Francia y Argelia con la decisión de París de expulsar a 12 agentes argelinos y llamar a su embajador en Argel

La crisis entre Francia y Argelia continúa en aumento. El Gobierno francés anunció este martes la expulsión de «12 agentes al servicio de la red consular y diplomática argelina en Francia» y llamó a consultas al embajador francés en Argel, Stéphane Romatet. Una medida que se produce como represalia por las 12 expulsiones de funcionarios franceses anunciadas por Argelia el pasado domingo.
«Francia toma nota con consternación de la decisión de las autoridades argelinas de expulsar a 12 agentes diplomáticos destinados en nuestra embajada en Argel. Esta decisión, que ignora las reglas básicas de nuestros procedimientos legales, es injustificada e incomprensible. Las autoridades argelinas asumen la responsabilidad del repentino deterioro de nuestras relaciones bilaterales», se lee en el comunicado del Palacio del Elíseo enviado a la prensa este martes.
El ministro de Exteriores, Jean-Noël Barrot, ya adelantó el pasado lunes que si Argelia no se retractaba de su decisión, Francia «respondería de inmediato», y así ha sido. «Las autoridades argelinas han optado por la escalada: estamos respondiendo tal como anunciamos», afirmó este martes el ministro a través de la red social X, quien insistió en que la respuesta surge de una «decisión injustificada e incomprensible» y que Francia está abierta al diálogo, «pero no de manera unidireccional».
Un ‘influencer’ y una crisis diplomática
Esta nueva crisis entre ambos países nace después de que el país galo detuviera a un agente consular argelino el pasado sábado, y a otras dos personas, sospechosas de haber participado en el secuestro del ‘influencer’ y opositor al régimen, Amir Boukhors, en París en abril de 2024. Los tres hombres detenidos fueron acusados por la Fiscalía Nacional Antiterrorista de Francia de «secuestro o detención seguida de liberación y pertenencia a organización terrorista».
El ministerio argelino prometió no «dejar esta situación sin consecuencias», denunciando un «argumento descabellado» por parte del Ministerio del Interior de Francia, y señalando una «conspiración judicial inadmisible». Tras criticar la detención del agente consular, el Gobierno decidió expulsar a 12 funcionarios franceses de Argelia, abriendo una crisis diplomática que no sucedía desde 1962.
A pesar de que la detención de estos ciudadanos argelinos ha agravado las relaciones entre ambos países, no ha sido lo único. En julio, Argelia anunció «retirada con efecto inmediato» de su embajador en París, tras darse a conocer el fortalecimiento del respaldo de Francia al plan marroquí de autonomía para el territorio del Sahara Occidental.
Después de esto, las tensiones han ido creciendo. A mediados de noviembre, el Gobierno argelino arrestó al escritor franco-argelino Boualem Sansal por sus comentarios sobre la frontera entre Argelia y Marruecos, y en los últimos meses, la negativa de Argelia de aceptar a sus nacionales expulsados del territorio francés han ayudado a aumentar la brecha diplomática hasta llegar a «un período de tensión sin precedentes», tal y como reconoció el propio ministro de Exteriores.
Precisamente, sobre la cuestión migratoria, el Palacio del Elíseo reafirmó en su comunicado que Francia seguirá «exigiendo que Argelia respete plenamente sus obligaciones», en términos de «cooperación».
Puedes consultar la fuente de este artículo aquí