Cientos de miles de israelíes ultraortodoxovestidos con su traje tradicional y sombrero negro, bloquearon el centro de Jerusalén para una manifestación masiva contra los intentos de reclutar hombres haredíes para el Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).

Durante décadas en Israel, los Haradis, que representan el 14% de la población, Estaban exentos del servicio militar, pero un fallo de la Corte Suprema el año pasado puso fin a esta excepción. Actualmente se está debatiendo un proyecto de ley sobre el reclutamiento de esta población.

El asunto pone Benjamín Netanyahu ya que gobierna en coalición con dos partidos ultraortodoxos -Shas y Judaísmo Unido de la Torá (JUT)- que se oponen frontalmente al reclutamiento de jóvenes eruditos de la Torá.

Por otro lado, Una gran parte de la sociedad israelí considera esta diferencia de trato una injusticia.especialmente tras la guerra en Gaza.

Netanyahu ha intentado negociar fórmulas legales que permitieran relajar la obligación para los ultraortodoxos—por ejemplo, estableciendo cuotas mínimas de reclutamiento o prolongando la transición—pero hasta ahora las respuestas de los partidos ultraortodoxos han sido negativas y han amenazado con retirarse del gobierno si un solo estudiante de los ultraortodoxos yescuelas talmúdicas es obligado a alistarse.

El Gobierno argumentó ante el Tribunal Supremo que una una imposición drástica podría «desgarrar la sociedad israelí», reflejando las profundas tensiones existentes entre los sectores religioso y secular.