La 26ª edición de los Latin Grammy arrancó en Las Vegas con la tradicional gala Persona del Año, que este año reconoció la trayectoria de Rafael. El cantante español de 82 años recibió el premio tras superar problemas de salud y regresar a los escenarios con la fuerza que la ha caracterizado durante más de seis décadas.

Rafael llegó acompañado de su esposa, Natalia Figueroa; sus tres hijos, Alejandra, Jacobo y Manuel; y dos de sus nietos, Manuela y Carlos. La familia posó junta en la alfombra roja, donde destacaron los elegantes looks de Natalia y Alejandra, ambas vestidas por Roberto Torretta, y el estilismo juvenil de Manuela.

La gala reunió Figuras de la música latina como David Bisbal, Aitana, Pablo López, Rozalén y Vanesa Martín, que interpretaron algunas de las canciones más emblemáticas del homenajeado. Bisbal entusiasmado con una versión de ‘yo soy ese’mientras que Aitana aportó frescura con ‘Mi gran noche’. Rozalén, vestida de negro con un diseño de Manuel de la Vega, rindió homenaje a la tradición española con su actuación.

Pablo López, recién casadoviajó a Las Vegas para participar en el homenaje y destacó la influencia de Raphael en su carrera: » Significa el milagro de que el escenario cobre vida, perseverancia y amor absoluto. «, declaró en la alfombra roja. Vanesa Martín, por su parte, optó por un look transparente y un vestido de tul negro para acompañar su actuación.

La gala también contó con la presencia de artistas internacionales como Carlos Rivera, Ángeles Toledano y Ángela Aguilarquien asistió junto a su padre Pepe Aguilar y Christian Nodal, reforzando la dimensión global del homenaje. Cada actuación fue un repaso de la huella que Raphael ha dejado en la música latina y española.

El momento más emotivo llegó cuando Enrique Bunbury Entregó el reconocimiento al artista destacando que «podría haber sido Persona del Año en cualquier década». Rafael, visiblemente emocionado, agradeció el homenaje y se lo dedicó a su público: » Es un momento impagable. Podría ser mi gran noche «Dijo, refiriéndose a una de sus canciones más icónicas.

‘Su gran noche’ en Las Vegas

Entre lágrimas y aplausos, la gala se cerró con Raphael en el escenario, rodeado de compañeros y familiares, reafirmando su lugar como uno de los grandes íconos de la música en español. La industria de la música latina celebró así no sólo su legado, sino también su resiliencia y capacidad para mover a varias generaciones.