La policía danesa está obligada a revelar detalles de nacionalidad cuando proporciona información a la prensa o al público, pero ha resistido la presión política para indicar también el origen étnico.

Los detalles de la práctica policial actualizada fueron proporcionados a la agencia de noticias Ritzau, que ya había informado anteriormente sobre el debate político en torno al tema.

El jefe de comunicación de la Policía Nacional (Rigspolitiet), René Gyldenstendeclaró en una declaración escrita que el origen étnico se considera información personal sensible, pero que no suele ocurrir lo mismo con la nacionalidad.

«Por lo tanto, en principio siempre se puede indicar la nacionalidad, pero sólo se pueden dar detalles sobre el origen étnico si existen razones policiales específicas para ello, por ejemplo en relación con la búsqueda de un individuo», dijo.

La información personal confidencial, incluidos detalles como dirección y fecha de nacimiento, está sujeta a las leyes de protección de datos.

El Ministro de Justicia, Peter Hummelgaardafirmó que quiere que la Policía comparta “toda la información relevante sobre los perpetradores”. “En general, apoyo que la Policía se comunique lo más abiertamente posible sobre quién está cometiendo delitos en nuestra sociedad”, aseguró Ritzau en un comentario escrito.

“Por eso me complace que la Policía Nacional haya actualizado el apartado correspondiente del manual policial sobre relaciones con los medios de comunicación”, añadió.

El Partido Popular Danés (DF), de extrema derecha, ha argumentado que el origen étnico no tiene por qué considerarse información personal sensible y, por lo tanto, puede ser declarado por la policía.

«Si das detalles específicos y mencionas los tatuajes y marcas de nacimiento que tiene la gente, eso es obviamente identificable. Pero una indicación general del color de cabello, altura, etc. de alguien, no es algo que considere sensible», dijo.