El Gobierno suprime la obligación de presentar la declaración de la renta a los desempleados
Perceptores de prestaciones por desempleo No estarán obligados a presentar la declaración del IRPFsegún un Real Decreto-Ley ‘ómnibus’ publicado este miércoles en el Boletín Oficial del Estado (BOE), donde se admite que tal exigencia «supera la intención del … «norma», por lo que «es necesario, por tanto, eliminar esta obligación de presentar declaración del IRPF para los beneficiarios de prestaciones por desempleo».
El pasado mes de marzo, el Ejecutivo ya decidió no obligar a los perceptores de prestaciones por desempleo a presentar la declaración del IRPF correspondiente al año 2024, que debía presentarse este año, posponiendo así este requisito hasta 2026.
Sin embargo, según el BOE, para evitar que, a través de una norma propia del ámbito social, como es la Ley General de la Seguridad Social, se produzca una modificación de las obligaciones tributarias de las personas que se benefician de prestaciones por desempleo, se considera necesario «eliminar esta obligación de presentar declaración del IRPF».
En este sentido, se considera que Su alcance actual no implica sólo una obligación formal y «supera la intención de la norma», que inicialmente era proporcionar una fuente adicional de información a la entidad que gestiona las prestaciones por desempleo.
Por otra parte, se aprecia que mantener esta obligación implica aumentar considerablemente las cargas administrativas contra de aproximadamente dos millones y medio de nuevas personas accediendo a las prestaciones por desempleo, a lo que hay que sumar lo que supondría para la Agencia Estatal de Administración Tributaria tener que gestionar este volumen de declaraciones adicionales.
Asimismo, el Gobierno señala que esta nueva obligación de presentar la declaración incluyó a más de 2,5 millones de contribuyentes como nuevos contribuyentes obligados a declarar el IRPF, de los cuales el 75% obtiene rentas por desempleo. menos de 5.400 eurospor lo que la ampliación de la obligación de presentar la declaración del IRPF no sólo supone una obligación formal, sino que implica que muchos de estos contribuyentes tienen la obligación de autoliquidar y pagar una cantidad del impuesto a la que no estarían obligados de acuerdo con la normativa estrictamente tributaria.
Además, señala que el establecimiento de esta obligación puede resultar en la pérdida del derecho aplicar el mínimo por descendiente, por lo que considera que “todo lo anterior justifica la necesidad de eliminarlo de forma inmediata”.
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