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El ministro de Asuntos Exteriores pide la integración de los kurdos en el aparato de seguridad a cambio de garantías de protección

MADRID, 3 de enero (EUROPA PRESS)-

La ministra alemana de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock, ha reconocido este viernes que su Gobierno es plenamente consciente del carácter yihadista de las nuevas autoridades sirias de Hayat Tahrir al Sham (HTS), pero ha admitido que ahora mismo prevalece la necesidad de seguridad. la población del país antes de advertir que Berlín y Bruselas juzgarán a la organización «por sus próximas acciones».

«Sabemos de dónde viene ideológicamente el HTS, lo que ha hecho en el pasado», explicó Baerbock tras protagonizar, junto a su homólogo francés Jean-Noël Barrot -en representación de la UE-, una reunión con el yihadista y actual líder hombre fuerte del país, Ahmed al Shara (alias ‘Abú Mohamed al Golani’).

«Pero seguiremos juzgando a HTS por sus acciones. A pesar de todo el escepticismo, no debemos perder la oportunidad de apoyar al pueblo de Siria en esta importante encrucijada», subrayó.

Baerbock también ha pedido este viernes a las milicias kurdo-árabes sirias que lideran las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) que se integren en la nueva organización de seguridad preparada por las autoridades yihadistas del país a cambio de garantías de protección para la minoría kurda en la Rojava siria (noreste). ).

«Todos los vecinos de Siria deben respetar la integridad del país. Para ello, las milicias kurdas deben integrarse en el aparato de seguridad sirio», explicó.

En declaraciones recogidas por la agencia kurda Rudaw, Baerbock también ha pedido el fin de los combates que mantienen actualmente las FDS con las milicias sirias respaldadas por Turquía en el norte del país.

En las horas previas, Baerbock y Barrot han podido visitar la prisión siria de Sednaya, uno de los símbolos de la represión del antiguo Gobierno del expresidente sirio Bashar al Assad, derrocado el mes pasado en la ofensiva rebelde liderada por la organización yihadista. alias ‘Al Golani’.

Durante una visita a la prisión, en las afueras de Damasco, el político reconoció la imposibilidad de restaurar la vida de las miles de víctimas que allí murieron, muchas de ellas presos políticos. «Pero todos podemos contribuir como comunidad internacional a garantizar que se haga justicia», argumentó en comentarios recogidos por la agencia DPA.

El ministro recordó que Alemania y la Unión Europea (UE) han apoyado en los últimos años a organizaciones como Cascos Blancos y la ONU en la recolección de pruebas para garantizar la justicia y el esclarecimiento de los hechos.

«Eso es exactamente lo que queremos continuar», comentó. «Por eso estamos aquí, entre otras cosas, para dejar claro que cuando se trata de reunir pruebas, impartir justicia e investigar estos terribles crímenes, también estamos del lado del pueblo de Siria», añadió.

Anteriormente, a su llegada a Damasco, Baerbock declaró que «es posible un nuevo comienzo político entre Europa y Siria, entre Alemania y Siria».

El requisito previo, precisó, es que todos los sirios, mujeres y hombres, independientemente de su grupo étnico o religioso, tengan un lugar en el proceso político, tengan garantizados sus derechos y reciban protección.

La ministra alemana subrayó que los derechos de las mujeres y de las minorías deben ser protegidos y «no deben verse socavados por retrasos excesivos antes de las elecciones o por medidas para islamizar los sistemas de justicia o educativos», después de que alias ‘Al Golani’ estimara, el pasado fin de semana, que el proceso de transición en Siria podría durar hasta cuatro años debido a la necesidad de redactar una nueva Constitución y completar un nuevo censo.