Así es el buque portaviones modernizado que la Armada pone a flote en noviembre
La empresa naval Navantia ha finalizado su proceso de mantenimiento y modernización Juan Carlos I(L-61),buque insignia marina española. Se trata de un portaaviones y buque de asalto anfibio que lleva quince años en servicio y se encuentra varado en el Astillero Navantia de Porto Real (Cádiz) desde el 17 de julio de 2025, con el objetivo de optimizarlo. Finalmente está listo y volverá a flotar el 10 de noviembre de 2025.
El Juan Carlos I, que movilizó a más de 300 profesionales y cerca de 40 empresas entre julio y noviembre de 2025, volverá a ser utilizado por la Armada para operaciones militares tras su modernización. Anteriormente participó en importantes ejercicios de la OTAN y brindó apoyo civil durante el terremoto turco de 2023 y la emergencia DANA de 2024. El barco está en tratamiento desde verano y ahora Navantia lo reclama Trabajos de mantenimiento y modernización. Le proporcionaron una fuerza naval más fuerte para ayudar a España en su momento de necesidad.
Características principales del barco Juan Carlos I
El L-61 tiene un desplazamiento de aproximadamente 26.000 toneladas, una longitud de 231 metros y una manga de 32 m. Como señala Navantia en un vídeo oficial colgado en YouTube, las capacidades aeronáuticas esperadas del barco son transportar y operar hasta 30 aviones, incluidos helicópteros medianos y pesados; o entre 10 y 12 aviones F35B o AV-8B+además de un número similar de helicópteros de tamaño mediano.
Reemplazar el sistema de propulsión
El primer objetivo de los trabajos de Navantia en el astillero de Port Real es la sustitución del sistema de propulsión, Mejorar el rendimiento y asegurar el funcionamiento futuro. Héctor Árias Macías, Teniente e Ingeniero Jefe del buque Juan Carlos I, explicó que el sistema original data del año 2010: “Dado que estamos experimentando mejoras tecnológicas, corresponde actualizar este sistema por uno más moderno y resistente. durará más«.
Raúl Torres Fernández, Teniente del Cuerpo de Ingenieros y Coordinador de Puesta a Tierra del JC1 en la Jefatura de Mantenimiento del Arsenal de Cádiz, explicó que el nuevo sistema es “más potente y fiable”. Por eso, el equipo quiere que el mantenimiento sea más escaso y eficiente. Torres detalla que la modificación permitirá a Juan Carlos I tener Mayor disponibilidad y mínimos fallos.
Manuel Jímenez Medina, Ship Manager de Navantia Cádiz, explicó que los principales problemas que encontraron estuvieron relacionados con la recepción de materiales, sobre todo teniendo en cuenta los plazos. Además, José Luis Gallardo, gerente del barco de Navantia Cádiz, afirmó que al realizarse principalmente durante el verano los trabajos encuentran dificultades en ocasiones debido a las altas temperaturas. A pesar de estos inconvenientes, el barco ya está listo para volver a flotar.
Cambios en aviones y barcos.
Además del sistema de propulsión, Navantia aclaró que han realizado otros cambios destacables en los últimos meses:
- Desmontaje de “Pod” existente.
- desinstalar 48 equipos sistema anterior.
- Instalar 50 nuevos dispositivos de propulsión nueva generación.
- 35.000 metros de conexiones tendidas alambrado nuevo (Potencia y Control).
- 31.000 metros de reconexión Cableado reutilizable.
Desde su entrega a la Armada en 2010, el buque L-61 se ha distinguido por su versatilidad, autonomía y capacidades logísticas. Se utiliza en operaciones de la OTAN, participó en ejercicios de proyección de fuerzas en el Mediterráneo Oriental y el Báltico con otros países de la alianza, e incluso demostró sus capacidades de apoyo humanitario, entregando ayuda y recursos aéreos a la Comunidad Valenciana durante la DANA 2024. Su misión final fue realizar complejas operaciones anfibias frente a las costas de Estados Unidos antes de quedar varado en el Astillero Navantia.
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