así es la UTE que se adjudica las tres fases del Hall Zero y refuerza su peso en las obras estratégicas de Barcelona
La ampliación del recinto de Gran Via de Fira de Barcelona avanza con un mismo nombre propio al frente: la UTE formada por Fomento de Construcciones y Contratas (FCC) y Comsa. El consorcio se ha adjudicado las tres fases del futuro Hall Zero, el gran proyecto que permitirá a la institución ferial sumar 60.000 metros cuadrados adicionales y consolidarse entre los grandes recintos europeos. La tercera y última etapa, aprobada el pasado mes de abril por Fira 2000 por 114 millones de euros, eleva el presupuesto total del proyecto hasta los 233 millones y confirma el papel predominante de ambas constructoras en las grandes infraestructuras del área metropolitana.
[–>[–>[–>Porque auqnue la de Fira no es la única obra que la UTE ha ganado en la capital catalana, su grotagonismo sí es destacable. Ese Hall Zero es el eje de la expansión del recinto de Gran Via: un nuevo pabellón con áreas expositivas, un centro de congresos, un edificio de oficinas de 12 plantas y un puente de conexión con los actuales pabellones. La infraestructura permitirá a Fira alcanzar los 300.000 m² de superficie bruta y absorber el crecimiento de salones como el Mobile World Congress o el Integrated Systems Europe (ISE), dos de los motores económicos más importantes para el congreso. Las obras entrarán en su fase final este junio y deberían estar operativas en 2027, aunque el horizonte real es tener disponible la infraestructura para que en 2028 se puedan celebrar estos dos eventos.
[–> [–>[–>La adjudicación completa a FCC y Comsa se explica porque esta UTE ya se llevó la fase de cimentación (44,7 millones) y la fase estructural (74,5 millones). Además, obtuvo la mejor puntuación técnica del proceso, uno de los elementos más determinantes en los concursos de Fira 2000, entidad participada por la Generalitat, el Ayuntamiento de Barcelona, la Diputación y el AMB que cerrará 2025 con más de 350 millones de euros de ingresos.
[–>[–>[–>
Sobre la empresa de Carlos Slim
[–>[–>[–>
Fundada en 1900, FCC es una de las mayores multinacionales españolas de infraestructuras. Con sede en Madrid y controlada en más de un 81% por Inmobiliaria Carso —el holding del mexicano Carlos Slim—, factura más de 8.000 millones de euros y opera en una treintena de países. Su actividad abarca construcción, servicios medioambientales, gestión del agua a través de Aqualia y concesiones.
[–>[–>[–>En Catalunya mantiene una larga trayectoria, pues ha participado en la construcción de líneas de metro, túneles, la ampliación del Port de Barcelona o proyectos de movilidad clave. Su presencia se ha reforzado en los últimos años con la reactivación de obras estratégicas como la L9 del metro, donde FCC y Comsa también parten como favoritas para el contrato de telecomunicaciones y energía de 116,6 millones.
[–>[–>[–>
Slim ha reforzado la orientación internacional y tecnológica del grupo, con una estrategia que prioriza obras de gran complejidad y alto componente de ingeniería, encajando con proyectos como el Hall Zero o la futura culminación de la L9.
[–>[–>
[–>Comsa acumula 130 años de trayectoria
[–>[–>[–>
Comsa Corporación, fundada en 1891 y de capital mayoritariamente familiar, es uno de los grupos históricos del sector en Catalunya. Con sede en Barcelona, factura alrededor de 1.000 millones de euros y combina actividad en infraestructuras, ingeniería industrial, mantenimiento ferroviario y concesiones. Opera en 25 países, aunque mantiene su núcleo de negocio en España.
[–>[–>[–>
Su relación con Barcelona es extensa, abarcando proyectos con TMB, FGC, participación en la L9, obras municipales y actuaciones para Fira de Barcelona. Ese arraigo territorial y su experiencia en la obra pública catalana la han convertido en un socio recurrente en grandes consorcios locales.
[–>[–>[–>
Archivo – Obras de la L9 del metro de Barcelona. / David Zorrakino – Europa Press – Archivo
[–>[–>[–>
En cuanto a la unión entre ambas, FCC y Comsa llevan años coincidiendo en UTE. No solo en Fira: también han ganado la obra de conexión B-10/C-32, un contrato de 66 millones del Ministerio de Transportes para mejorar la movilidad entre Barcelona y el Baix Llobregat, al que se suma la adjudicación por parte de dos filiales de FCC y otras dos de Comsa del contrato por 127 millones de euros para la instalación de sistemas de telecomunicaciones, señalización, control, energía y elementos de seguridad en el tramo central de las Líneas 9 y 10 de Metro de Barcelona.
[–>[–>[–>
Entre su historial, también destaca su ejecución de las obras de urbanización del lado mar de la Gran Vía que incluirán la modificación del trazado del Trambesòs y el desdoblamiento de las vías entre Les Glòries y la Rambla de Poblenou. Estos últimos trabajos, que comenzaron en octubre, se alargarán 17 meses y que cuentan con un presupuesto de 23,6 millones de euros sin IVA, que asumen casi a partes iguales la Autoritat del Transport Metropolità (ATM) y la empresa municipal BIMSA.
[–>[–>[–>
Suscríbete para seguir leyendo
Puedes consultar la fuente de este artículo aquí