La prórroga del permiso por fallecimiento de un familiar y la implantación de un nuevo permiso por cuidados paliativos de primer y segundo grado probablemente tendrá hoy su último capítulo, pero sólo con el apoyo de los sindicatos, CC OO y UGT, y con el rechazo de las patronales, CEOE y Cepyme. Todo apunta a que el Ministerio de Trabajo celebrará la última reunión de esta mesa de diálogo tras la amenaza y ultimátum de la vicepresidenta segunda y responsable de Trabajo, Yolanda Díaz, apenas 10 días después de la ruptura con los representantes de los empresarios, expulsados ​​de la mesa por negarse a cerrar un acuerdo antes de final de año si las empresas tienen que asumir los costes de esta medida, lo que supone un «nuevo castigo a la actividad privada», especialmente para las pymes, critican fuentes patronales.

Por ello, Díaz intentará volver a sellar con las organizaciones sindicales aprobar sólo con el apoyo de los sindicatos CC OO y UGT, lo que la patronal rechazó «en el fondo y en la forma» y porque «no se aplica de la misma manera al sector público, lo que supone un ataque a la actividad privada, además de porque se ha hecho «sin consulta previa al diálogo social y anunciado en medio de un desayuno informativo el pasado mes de septiembre», formas que CC OO y UGT también han afeado, pese a que sí compartieron la Díaz ha seguido encumbrando y centrando sus ataques en el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, al que ha acusado de «falta de humanidad» por negarse a firmar su propuesta.

El secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, propondrá hoy a los sindicatos ampliar el permiso por fallecimiento de cónyuge, pareja de hecho o familiares hasta el segundo grado de consanguinidad (hijos, nietos y también abuelos) hasta 10 días y que se pueda disfrutar hasta que transcurran cuatro semanas desde el fallecimiento en días continuos o discontinuos. El Ministerio mantiene los dos días actuales de permiso para los cuñados y abuelos del cónyuge, ampliables en otros dos en caso de desplazamiento.

Respecto al nuevo permiso de cuidados paliativos, Díaz propone dar hasta 15 días para el nuevo permiso de cuidados paliativos para el cónyuge, pareja de hecho o familiares también hasta el segundo grado por consanguinidad. Este podrá dividirse en dos fracciones por «un plazo de tres meses contados desde el primer día en que el trabajador aproveche dicha licencia y hasta la fecha del fallecimiento de la persona que requiera dichos cuidados». Este permiso sólo podrá utilizarse una vez para la persona que requiera cuidados paliativos, «sin perjuicio del derecho del trabajador a beneficiarse, adicionalmente y durante ese período, de baja por hospitalización o intervención quirúrgica sin hospitalización si el paciente estuviera recibiendo cuidados paliativos en régimen de cuidados domiciliarios», señala el borrador del texto.

Además, se incluye la ampliación del derecho a la reducción de jornada, con una reducción proporcional del salario entre, al menos, «un octavo y un máximo de la mitad de la duración, para quienes necesiten cuidar de un cónyuge o pareja de hecho, o de un familiar hasta el segundo grado de consanguinidad, que requiera cuidados paliativos, tanto en régimen hospitalario como domiciliario».

Trabajo también quiere incluir la incorporación de un permiso de un día para acompañar a una persona cuando va a recibir la eutanasia y al que tendrá derecho cualquier trabajador que haya sido designado por ellos para acompañarla, independientemente de si existe parentesco o no.

Pero este real decreto puede tener un recorrido muy corto, ya que el Parlamento debe apoyar esta reforma y no tiene el apoyo necesario tras la ruptura de uno de sus socios legislativos, Junts, que ya ha manifestado su oposición, y junto a PP y Vox Junts, PP y Vox tumbarán la propuesta como ya hicieron en septiembre con la reducción de la jornada laboral de 40 a 37,5 horas semanales. Las tres formaciones se mantienen en la línea de CEOE y Cepyme, que denuncian que «estos permisos no han sido discutidos en ningún momento en una mesa de negociación» y que no pueden asumir la propuesta «en ninguno de sus extremos, ni en el fondo ni en la forma presentada en el documento de consideraciones y propuestas técnicas remitido por el Ministerio».