El BCE advierte al Gobierno de que el impuesto a la banca no debe afectar al crédito
El vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, indicó este jueves que la posición de la institución es clara y la Los impuestos bancarios «no deben afectar ni a la solvencia del sector ni a la concesión de crédito»una advertencia al Gobierno.
Durante su intervención en un encuentro financiero organizado por Deloitte y ABC y preguntado por el impuesto bancario impulsado por el Gobierno en España, De Guindos señaló que no todos los impuestos del sector son iguales, por poner inmediatamente el ejemplo de Italia.
En Italia, explicó, el impuesto se puede reducir si el banco destina parte del beneficio a mejorar su solvencia. lo que implica que esta opción cumpliría con la premisa del BCE de que este tipo de gravámenes no afectan ni a la solvencia ni al crédito.
Sin embargo, en el caso de España, ha dicho que no sabe qué pasará, pero en cualquier caso, si hay una modificación en este sentido y se aplica un nuevo impuesto al sector, el BCE lo analizará teniendo en cuenta cuenta aquellas dos consideraciones que no afectan a la solvencia ni al crédito.
Las entidades financieras vienen advirtiendo desde el principio de que un impuesto específico al sector discrimina y repercutirá en su capacidad de otorgar crédito, ya que reduce su capital.
Más impuestos y miedo a una guerra comercial
Respecto a la situación económica en Europa, De Guindos explicó que no hay buenas noticias porque la recuperación no se ha producido como esperaba el BCE, aunque la buena noticia es que la inflación se ha reducido sin que el Viejo Continente entre en crisis. recesión.
Sin embargo, ha llamado la atención que ha habido una recuperación de los ingresos con aumentos salariales, junto con la caída de la inflación, y esto no se ha trasladado a un mayor consumo.
Su sospecha es que las familias pueden estar descontando que habrá subidas de impuestos para reducir el déficit público y eso les impediría consumir aunque los precios hayan bajado y hayan ganado poder adquisitivo.
De Guindos ha admitido que la política monetaria «no es todopoderosa» y el objetivo del BCE es la inflación, ya que el crecimiento económico depende de los mercados de bienes y servicios, del mercado laboral, de las reformas estructurales o de la competitividad de cada país.
Además, ha recordado, en Europa existen disparidades entre distintos países en cuanto a crecimiento económico, ya que, por ejemplo, no es lo mismo que haya un mayor gasto público o un aumento de población por una mayor inmigración, como ha ocurrido en España. .
Por otro lado, De Guindos ha advertido que El mundo podría entrar en una «guerra comercial» tras la victoria de Donald Trump en Estados Unidos si decide imponer arancelesya que supone que la respuesta del resto de países puede ser hacer lo mismo.
Respecto a las diferencias de valoración bursátil de los bancos europeos respecto a los americanos, el vicepresidente del BCE ha considerado que en el Viejo Continente son menores porque el potencial de crecimiento de la economía es menor, no hay unión bancaria y, además, , existe la incertidumbre con los impuestos.
Pero, marcando distancia de la teoría de los banqueros españoles, ha rechazado que esa menor valoración bursátil de las entidades europeas se deba a la regulación.
«Es muy fácil echarle la culpa a la regulación, pero creo que la diferencia de precios tiene que ver con otros elementos», añadió antes de defender la necesidad de avanzar en la integración europea y elogiar las fusiones transfronterizas.
De Guindos sostiene que los países europeos por sí solos, por grandes que sean, no podrán tener la relevancia de ser actores globales, por lo que una mayor integración europea es la única salida que ve.
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