El euro se dispara a máximos desde 2021 frente al dólar ante la presión de Trump sobre la Fed
El euro ha marcado este jueves su nivel más alto frente al dólar desde septiembre de 2021, superando el umbral de los 1,17 dólares, impulsado por el creciente nerviosismo en torno a la política monetaria estadounidense y las presiones políticas sobre la Reserva Federal (Fed).
En concreto, la divisa europea se apreciaba más de un 0,6% frente al dólar en la jornada y alcanzaba un tipo de cambio de 1,1733 dólares, en un contexto en el que los mercados anticipan un recorte de tipos por parte de la Fed en septiembre. Desde que Donald Trump asumió la presidencia de Estados Unidos el pasado 20 de enero, el euro acumula una revalorización cercana al 13% frente al ‘billete verde’.
El renovado mandato de Trump ha reactivado la incertidumbre en torno a la independencia del banco central estadounidense. Según publica The Wall Street Journal, el presidente estadounidense estaría considerando anunciar el nombre del sucesor de Jerome Powell a la vuelta del verano, a pesar de que el actual presidente de la Fed tiene mandato hasta mayo de 2026.
Trump afirmó ayer que tiene «tres o cuatro personas» en mente para dirigir la Reserva Federal, aunque evitó mencionar nombres o dar un calendario concreto. Estas declaraciones llegan en un momento delicado para la Fed, que sigue evaluando el impacto inflacionario de los aranceles y mantiene la cautela sobre el calendario de posibles bajadas de tipos.
Jerome Powell, en su comparecencia semestral ante la Cámara de Representantes esta semana, recalcó la «alta incertidumbre» sobre la evolución de la inflación, sin comprometerse con una bajada en la reunión de julio. No obstante, reconoció que si las presiones inflacionarias continúan disminuyendo, el banco central podría actuar «más pronto que tarde».
El fortalecimiento del euro contrasta con la postura más expansiva del Banco Central Europeo, que ha recortado los tipos de interés de forma progresiva en los últimos meses. Sin embargo, la inestabilidad institucional en EE.UU. parece estar pesando más en la cotización del dólar, debilitando su atractivo como refugio para los inversores.
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