El Getafe falló este sábado ante el Espanyol en un duelo que se decidió con el gol de Leandro Cabrera en la segunda parte. El conjunto getafense, pese a ello, disparó más con corazón que acierto y buscó el empate que sólo se acercó con el balón despejado por Dimitrovic y colándose en el tiempo añadido.

Bordalás movió el banquillo y metió toda la pólvora que tenía: Borja Mayoral, Abde Kamara, Coba… pero faltaba un hombre. El que no estaba disponible. Los habitantes del sur de Madrid achacaron la ausencia de Luis Milla, jugador del equipo azulgrana y que no pudo estar presente por la tarjeta roja recibida ante el Villarreal.

Y jugadores como Luis Milla no son pocos. Y en un equipo como el Getafe, con una plantilla reducida, es aún más visible. Bordalás sustituyó al ‘5’ por Djené en una secuencia en la que también fue titular Mario Martín, aunque en posición adelantada, además de Javi Muñoz, que salió en la segunda parte. Un perfil de medios o soluciones que se aleja del estilo de Milla y que el equipo notó delante de los loros.

El Getafe volvió a perder por segunda jornada consecutiva y afronta este final de año con dos salidas, con la Copa este jueves ante el Burgos y el domingo, cuando viaje al Real Betis para cerrar 2025.