Los primeros resultados oficiales auguran una segunda vuelta entre el presidente proeuropeo y su sorprendente rival

MADRID, 24 (PRENSA EUROPA)

El Primer Ministro de Rumanía, el socialdemócrata Marcel Ciolacu, y el candidato nacionalista independiente Calin Georgescu son ahora favoritos absolutos para enfrentarse en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales rumanas del 8 de diciembre, según los primeros resultados oficiales que, con 88 por ciento de los votos escrutados, dejan a ambos en situación de empate técnico.

Los resultados aún no son del todo concluyentes porque la comisión está terminando de procesar los votos de la diáspora pero todo indica, salvo catástrofe, que ambos protagonizarán un duelo dentro de dos semanas en un escenario casi imposible de anticipar en base a encuestas anteriores. La participación en todo el país y en la diáspora rumana ha sido del 52,5 por ciento, ligeramente por encima del 51,2 por ciento que votó en las anteriores elecciones presidenciales de 2019.

Georgescu, que ha dado la sorpresa absoluta frente a algunas encuestas que no le sitúan ni siquiera entre los tres primeros lugares, ha recibido hasta el momento el 21,97 por ciento de los votos, cinco décimas más que el primer ministro (21,48 por ciento). Ambos están ahora cinco puntos porcentuales por delante de la tercera en discordia, la liberal Elena Lasconi (16,41 por ciento), según datos de la comisión electoral.

Si estos resultados se mantienen hasta el final, dentro de dos semanas la población rumana elegirá entre la opción proeuropea representada por Ciolacu frente a la visión nacionalista representada por Georgescu, agrónomo especializado en desarrollo sostenible y ex relator de Naciones Unidas sobre el vertido de productos peligrosos. . .

Según analistas de la cadena rumana Antena24, la candidatura de Georgescu se ha visto alimentada por un fuerte descontento con la política tradicional. Su mensaje, rotundo en cuestiones de soberanía y defensa de los intereses nacionales, resonó en una parte importante del electorado rumano. Además, Georgescu ha sido figura de una masiva campaña en las redes sociales, especialmente en la plataforma TikTok.

Rumanía, hay que recordarlo, atraviesa un momento crucial, ya que se enfrenta a desafíos económicos y sociales, mientras que el presidente electo tendrá que gestionar un contexto geopolítico cada vez más tenso en Europa del Este, marcado por la guerra en Ucrania y las crecientes tensiones con Moscú.

Menos clara es la supuesta conexión de Georgescu con Rusia, aunque el ingeniero de 62 años siempre ha sido retratado positivamente por los medios de comunicación rusos financiados por el Kremlin, Sputnik y Russia Today. El candidato incluso declaró en abril que «la sabiduría de Rusia da a Rumanía una oportunidad porque, en este momento, Rumanía no está preparada para nada, ni diplomática ni estratégicamente».

Los resultados también apuntan a una clara derrota del presidente de extrema derecha de la Alianza para la Unión de los Rumanos (AUR), George Simion, que habría obtenido alrededor del 14,9 por ciento de los votos; datos que han quedado en un segundo plano, detrás del sorprendente resultado de Georgescu.