Igualdad precisa que esta iniciativa tiene como objetivo optimizar este recurso de geolocalización para los agresores sexistas que se benefician de una orden de alejamiento. Estos sistemas funcionan con cobertura móvil. Es por esto que solicitan que se actualice periódicamente el mapa de cobertura con todos los operadores nacionales del sector.. El objetivo es que las autoridades judiciales sepan dónde es efectivo instalar estas pulseras y dónde no, en función de la cobertura existente. La mayoría de los errores han estado en zonas rurales

El ministerio que dirige Ana Redondo enviará esta información al Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) cuando esté disponible, para que pueda ser difundida a las autoridades judiciales que deben decidir sobre la instalación de estos dispositivos. También estará a disposición de las fuerzas y organismos de seguridad del Estado. Hace unas semanas, el Departamento de Igualdad anunció que se había iniciado una investigación interna y una auditoría externa para examinar los fallos detectados en el sistema Cometa.

Mejoras reclamadas

El Observatorio contra la violencia de género El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) pidió esta semana estas mejoras porque los fallos de geolocalización de las pulseras son una de las incidencias «más recurrentes».según afirma la presidenta del Observatorio, Esther Rojo, en una entrevista. Fuentes de Igualdad aseguran, sin embargo, que la iniciativa partió del ministerio. De todas formas ya existen mujeres que están considerando reclamar contra fallas del sistema

Una de las intenciones es incluir informes que serán trasladados a la policía para facilitar la «plena colaboración institucional» contra la violencia de género, según una nota de Igualdad. Los resultados de estos informes también se comunicarán al Observatorio de Violencia de Género del CGPJ para que, en colaboración con la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género -de la que depende el sistema Cometa-, sean difundidos «a todas las autoridades judiciales».

El sistema Cometa nació para vigilar a abusadores machistas que están sujetos a una orden de alejamiento. Esto se hace a través de pulseras que geolocalizan a los dos y alertan a las autoridades en caso de que la persona maltratada se acerque a la víctima. Sin embargo, la utilidad de estos dispositivos ha sido puesta en duda desde el descubrimiento el pasado mes de septiembre de fallos que hicieron que durante varios meses no se pudieran conocer los movimientos de los atacantes antes del 20 de marzo de 2024.

Los incidentes se produjeron porque el ministerio cambió la empresa que los gestiona y se renovaron los dispositivos y algunas funciones del servicio, lo que provocó vulnerabilidades. Uno de ellos fue precisamente que las zonas rurales estaban aún menos protegidas. Porque, al cambiar de proveedor, muchos de ellos se quedaron sin cobertura, lo que provoca que las alertas tarden más en llegar a las víctimas y que la ubicación de los atacantes sea imprecisa. El nuevo mapeo anunciado por el ministerio intenta resolver temporalmente esta parte del problema porque, hasta mayo de 2026, el contrato con el actual proveedor sigue en vigor.

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