fases lunares, siembra y corte de pelo
Cómo funciona El calendario lunar de cuerpomente
Nuestro calendario lunar muestra cómo evolucionan las fases de la Luna mes a mes y, en este sentido, funciona como otros calendarios lunares: día a día puedes ver gráficamente qué forma presenta la Luna y en qué proporción está iluminada. Podrás ver el calendario lunar con las fases de la Luna de todo el año y los calendarios lunares de cada mes, para que puedas averiguar cómo está la Luna y en qué fase lunar está en cualquier día del año.
Pero después el calendario lunar de Cuerpomente va un poco más allá, porque incorpora gráficamente una información que no se suele encontrar en otros calendarios lunares. Mediante barras de colores puedes ver rápidamente, mes a mes, cuándo la Luna, con su influencia sobre la Tierra, favorece particularmente el corte de pelo o la depilación.
Esos días coinciden con lo que en el calendario lunar de agricultura biodinámica se conocen como «periodos raíz», «periodos hoja» y «periodos flor» y la órbita de la Luna se encuentra ascendiendo o descendiendo según sea el caso.
Cómo identificar las fases de la luna
Puedes fijarte en varios aspectos para saber qué fase lunar tenemos en un día concreto.
La silueta iluminada de la Luna
En el hemisferio norte, la Luna se ilumina por la derecha cuando se encuentra en fase creciente, de modo que la parte iluminada tiende a dibujar una «D». Es una «D» vacía, ahuecada por la izquierda, cuando la Luna se encuentra en el primer tramo de la fase creciente, es decir, entre la Luna nueva y el primer cuarto creciente.
Cuando la Luna llega a su fase de cuarto creciente, vemos la «D» perfecta, media Luna iluminada por su mitad derecha. Esa Luna se va abultando, o sacando «joroba», a medida que se va llenando la otra mitad para alcanzar el plenilunio, otra forma de referirse a la fase de Luna llena.
Durante la fase menguante, ocurre lo contrario. La Luna primero muestra su joroba, que va reduciéndose a medida que pasan los días, y lo hace por el lado opuesto al que se iluminó en la última parte de la fase creciente. Cuando llega al cuarto menguante, la mitad iluminada es la izquierda y, a partir de ahí, la Luna se va ahuecando y dibujando una «C», cada día más delgada.
En Luna nueva nuestro satélite no se ve, así que aparece en negro en el calendario lunar y simplemente no lo ves en toda la noche (ni durante el día) si miras al cielo.
A qué hora sale y se oculta la Luna
Otra pista que te pueden ayudar a identificar la fase de la Luna es el horario que lleva en el momento en el que la miras. La Luna llena asoma por el horizonte a la hora del atardecer y se oculta con el amanecer. A partir de ahí va retrasando cada noche un poco su salida.
Cuando llega la Luna nueva, las tornas se invierten y la Luna está ya saliendo a la hora del amanecer y poniéndose al atardecer. En ambas fases lunares, la Luna está alineada con el Sol y la Tierra, de ahí esos horarios, pero está situada de forma distinta: la Tierra queda en medio cuando es Luna llena, mientras que cuando hay Luna nueva es la Luna la que queda entre nosotros y el Sol.
Todo esto hace que, durante la fase menguante, la Luna salga después de que haya anochecido, cada noche un poco más tarde, y que durante la fase creciente salga por la mañana, durante el día, y se ponga después del atardecer.
¿Es lo mismo en el hemisferio sur?
En el hemisferio sur las fases de la Luna son las mismas, pero cambia la orientación de la Luna, es decir, el lado por el que mengua o crece.
Una forma fácil de recordarlo es que en el hemisferio sur la «C» coincide con la inicial de creciente, y es fase creciente, y la «D» coincide con el momento en el que la Luna decrece, indicando la «D» la inicial de decrecer. En el hemisferio norte, en cambio, las iniciales son las contrarias.
La filosofía de este calendario lunar
Lo que propone este calendario es disfrutar de la belleza de lo que nos rodea aprendiendo a estar atentos a las fases de la Luna, los movimientos de otros astros celestes y los eventos astronómicos más destacados del año, pero también quiere ser una invitación a vivir en mayor sintonía con los ritmos de la naturaleza. Sabiendo qué Luna hay cada día, puedes tenerla en cuenta para vivir de forma más conectada con las fases lunares.
Los seres humanos no vivimos aislados de la naturaleza que nos rodea, del mismo modo que lo que ocurre en la Tierra no sucede sin la influencia del sistema solar del que formamos parte. Vivir en sintonía con los ritmos de la naturaleza se ha demostrado que influye positivamente en el bienestar y este calendario lunar se ofrece como una herramienta para poder profundizar en esta filosofía de vida desde un punto de vista muy práctico.
La Luna influye en las mareas y cada día mueve ingentes masas del agua que cubren nuestro planeta. Eso nadie lo pone en duda. También en el comportamiento de muchos seres vivos, un aspecto estudiado por la ciencia. Muchos estudios se han centrado concretamente en su influencia en las personas y, aunque los resultados son controvertidos, algunos señalan, por ejemplo, que la Luna podría influir en la calidad y la duración del sueño.
Su influencia en el agua no afecta solo al agua de los océanos. Los seres vivos estamos hechos en nuestra mayor parte de agua. En agricultura, cuando se ha tenido en cuenta la influencia de la Luna sobre los cultivos, es en gran parte debido a esa influencia sobre los líquidos en las plantas.
Desde hace siglos los seres humanos se fijan en el cielo para organizarse a la hora de cultivar la tierra. Todo ese conocimiento adquirido a través de la observación, de probar cosas y evaluar el resultado, ha ido pasando de una generación a otra y se ha ido recogiendo en los diferentes calendarios del agricultor.
Muchas de las recomendaciones que se hacían en esos almanaques agrícolas siguen haciéndose hoy. Por eso, el calendario lunar se sigue utilizando entre quienes buscan cuidar las plantas teniendo en cuenta toda esta influencia, algo relativamente habitual también en quienes cultivan o cuidan del jardín de forma ecológica.
La tradición del calendario biodinámico
De esa forma de cultivar la tierra teniendo en cuenta la influencia lunar han surgido diferentes tradiciones. Una de ellas es la agricultura biodinámica, una rama de la filosofía antrosófica, en cuyos criterios se basan las recomendaciones de corte de pelo y depilación del calendario lunar de Cuerpomente.
La agricultura biodinámica es conocida hoy como una forma de trabajar la tierra en sintonía con la Luna y su paso por las diferentes constelaciones que pone el acento en métodos ecológicos e integrados.
Sus cálculos permiten determinar cuándo sembrar un tipo u otro de plantas, si es buen momento para trasplantar o para podar, si ese día un injerto tomará bien o si lo que coseches aguantará tiempo en la despensa, por dar solo algunos ejemplos de todo lo que puede tener en cuenta. Esos cálculos se pueden extrapolar a cuidados del cuerpo como la eliminación de toxinas, la nutrición de la piel o, los más conocidos, el corte de pelo y la depilación.
Este calendario lunar que tienes entre las manos recoge esta información, con las mejores fechas para realizarse un corte de pelo o la depilación, basándose en los datos que cada año publica la editorial Rudolf Seiner en el Calendario de agricultura biodinámica de Maria Thun, uno de los grandes libros de referencia de la agricultura biodinámica.
Cómo saber cuándo cortarse el pelo o depilarse
En muchos calendarios lunares se pone el acento en la fase lunar a la hora de recomendar un corte de pelo o la depilación. La fase lunar menguante se considera en general la mejor para cortarse el pelo y para depilarse, pues el pelo mantiene mejor su forma y el vello corporal tarda más en volver a salir. La fase creciente se reserva para cortes que sobre todo lo que buscan es revitalizar y se suele recomendar, por ejemplo, cortarse las puntas.
Aunque en nuestro calendario las fases lunares también influyen y pueden introducir muchos matices, en lo que nos fijamos, siguiendo los criterios del calendario lunar biodinámico, es sobre todo en la altura de la Luna y en su órbita, entre otros aspectos.
La altura de la Luna se determina mirando la constelación frente a la que esta se ve al mirar hacia arriba y es lo que determina que un momento determinado se considere periodo hoja, raíz, flor o fruto. Luego, en función de si la Luna está ascendiendo o descendiendo en su órbita, esos periodos serán recomendables o no para cortarse el pelo o depilarse si lo que se busca es optimizar resultados.
Cuándo cortarse el pelo
Todo corte de pelo tiene un efecto revitalizante, pero según en qué quieras poner el acento será más recomendable elegir un momento u otro:
- Para cortarse el pelo y que crezca fuerte, los expertos recomiendan elegir un «periodo raíz» en Luna descendente, que en nuestro calendario aparecerá marcado en lila. En los periodos raíz la Luna pasa frente a alguna de las constelaciones llamadas de tierra: Tauro, Virgo y Capricornio.
- Para cortarse el pelo y que crezca rápido, lo ideal es elegir un «periodo hoja» en órbita ascendente, lo que aparece marcado en verde. Los periodos hoja se dan cuando la Luna está pasando frente a una constelación de agua: Cáncer, Escorpio y Piscis.
Cuándo depilarse
En cuanto a la depilación, lo que los expertos recomiendan es optar por un «periodo flor» cuando la Luna se encuentra en movimiento descendente. Las constelaciones por las que pasa la Luna en estos momentos son las de aire: Géminis, Libra y Acuario.
Depilarse en esos momentos puede hacer que el crecimiento del vello corporal se enlentezca, con lo que la necesidad de volverse a depilar se atrasa ligeramente.
Cómo utilizar el calendario lunar para el huerto o el jardín
Las recomendaciones y observaciones de la agricultura biodinámica a la hora de trabajar las plantas guiándose por cómo está la Luna y la influencia de otros cuerpos celestes son numerosas y es imposible abarcarlo todo aquí. Te dejamos algunas pinceladas para que puedas empezar a experimentar y comprobar por ti mismo los resultados.
Cada planta tiene su momento
En agricultura biodinámica, la energía lunar es la que marca el tipo de planta que va a salir más beneficiado si la trabajas en ese momento. Seguramente lo habrás deducido a estas alturas:
- En los periodos hoja, lo ideal es trabajar en plantas que cultivas por sus hojas y tallos, como apios, borrajas, lechugas…
- En los periodos raíz, se trata de trabajar en raíces y tubérculos.
- En los periodos flor, son las plantas que cultivas por sus flores las que saldrán más beneficiadas si te ocupas de ellas.
- En los periodos fruto, le toca a árboles frutales y cualquier planta que cultives por sus frutos.
La órbita de la Luna
Cada dos semanas aproximadamente la Luna cambia de órbita ascendente a descendente o a la inversa. Esto significa que cada día se muestra a mayor o menos altura relativa en el arco que dibuja en el cielo. ¿Cómo afecta?
Cuando la Luna está en órbita descendente, la savia de las plantas desciende a las raíces. Al tener mucha energía en la parte de abajo, las plantas tienen mayor capacidad para adaptarse después de un trasplante. También se recuperan mejor de las podas fuertes, pues no «sangran» tanto y cicatrizan antes.
Cuando la luna está en órbita ascendente, la savia asciende y se concentra más en el tallo y las partes aéreas: hojas, tallos y flores. Por eso se desaconseja trasplantar o hacer podas muy fuertes, pues se observa que las plantas sufren más y tardan mucho en recuperarse. En cambio, se recomienda dejar los injertos para estos momentos, pues toman mejor.
La fase lunar te marca
Las fases lunares también son fundamentales a la hora de cuidar las plantas. En general, en fase creciente se considera que la germinación de las semillas es más efectiva, por lo que se suele recomendar sembrar.
Si es un día hoja, lo suyo es entonces sembrar plantas que se cultivan por sus hojas; si es un día raíz, sembrar raíces o tubérculos; si es un día flor, aquellas plantas que tienes por sus flores; y si es un día fruto, tus árboles frutales o plantitas de fruto. La órbita ascendente potencia este efecto favorecedor.
En fase menguante, las labores de tierra ayudarán a fortalecer las plantas, sobre todo las raíces. En este caso, el efecto también se ve potenciado si la órbita es descendente.
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