François Bayrou se enfrenta a su primer discurso ante la Asamblea Nacional bajo la amenaza de una moción
Lunes por la tarde. Los socialistas llegan al Palacio de Matignon para reunirse por última vez con el primer ministro, François Bayrou. Falta menos de un día para que Bayrou dé su primer discurso de política general frente a la Asamblea Nacional, pero las cosas aún no están lo suficientemente atadas como para poder explicar la hoja de ruta del nuevo Gobierno.
En mano del partido socialista está que el Ejecutivo pueda aprobar sus presupuestos e iniciar su andadura, pero los socialistas no se lo pondrán fácil. En el corazón de la discusión: la reforma de las pensiones. Reclaman su suspensión a cambio de un pacto de no censura. De lo contrario, los 66 diputados socialistas votarán la moción de censura y, de nuevo, caería otro Gobierno de Macron.
En la reunión del lunes por tarde, Bayrou citó para la mesa de reunión al ministro de Economía y cuentas públicas, Éric Lombard y Amélie de Montchalin, al jefe de los socialistas, Olivier Faure, y a los presidentes de los grupos parlamentarios, Boris Vallaud y Patrick Kanner. A la salida, fumata negra: “Ausencia de avances significativos”, afirmó el entorno socialista.
Acercamiento de posturas
«Los ministros nos han presentado una copia casi exacta del presupuesto de Michel Barnier. Es inaceptable tal como está», explicó uno de los negociadores socialistas a la agencia AFP. Según él, en este momento no hay ninguna propuesta de suspender la reforma de las pensiones, como exigen los socialistas, sino sólo «una negociación sindical de una posible nueva reforma».
Sin embargo, este martes, Faure anunció que había presentado una nueva propuesta al primer ministro para acercar posturas y cerrar las negociaciones. Ambas partes se encontarían a las puertas de un «posible acuerdo», asegurando que el Partido Socialista estaba «en proceso de obtener un cierto número de concesiones notables».
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Primer discurso de Bayrou
Si François Bayrou anuncia en su primer discurso frente a la Asamblea Nacional cosas que son «irrazonables e inaceptables» para Agrupamiento Nacional, «podemos censurarlo inmediatamente, aunque no queremos hacerlo», declaró el presidente delegado de la extrema derecha, Jean-Philippe Tanguy.
Quien sí que presentará una moción de censura nada más acabar el primer discurso de política general de François Bayrou frente a la Asamblea Nacional este martes es La Francia Insumisa. El coordinador de los insumisos, Manuel Bompard, lo confirmó: «Propondremos a todos los diputados del Nuevo Frente Popular que lo deseen que firmen esta moción de censura. Veremos quién votará a favor y quién no, y es evidente que los que no voten habrán roto con el Nuevo Frente Popular».
El primer ministro no lo tiene fácil. Con una Asamblea Nacional fracturada, donde la mayoría presidencial no tiene el control, gobernar la Francia actual es uno de los mayores retos para cualquier ejecutivo. Bien lo saben Elizabeth Borne, Gabriel Attal, y Michel Barnier, quienes en 2024 intentaron desenredar el lío político, que para muchos tiene un claro culpable: Emmanuel Macron.
Puerta abierta
Este martes a las 15 horas, François Bayrou se enfrentará a la Asamblea Nacional pero pocos esperan grandes anuncios, más bien un discurso reciclado de su predecesor: justicia fiscal, gasto público, pero «ninguna suspensión ni derogación» de la reforma de las pensiones, ha sentenciado el propio protagonista. Aunque sí que ha dejado la puerta abierta a una posible renegociación de las condiciones de dicha reforma. Algo que ayudaría a la polícia francesa a salir de las arenas movedizas en las que se encuentra desde hace meses.
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Los mercados franceses piden estabilidad política. Urge un plan de acción para reducir el déficit público y aprobar los presupuestos de 2025 que ayuden a abordar temas cruciales, como el aumento del índice de pobreza en el país, la pérdida de poder adquisitivo de los ciudadanos o las carencias del sector público.
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