GUERRA ORIENTE PRÓXIMO | La violencia de soldados y colonos israelíes aumenta a niveles de récord en la Cisjordania ocupada
En cualquier rincón de la Cisjordania ocupada se esconden historias trágicas. Son relatos de vidas comunes, pero poseen altas dosis de desposesión, encarcelamiento, exilio y mucho, mucho sufrimiento. «Mis vecinos son artistas, pero no pueden salir de aquí para mostrar su arte», cuenta Mona, una joven madre del norte de los asediados territorios palestinos que prefiere ocultar su identidad. Esta vez relata las vidas de otros, porque contar la propia es hundirse en un barro de pena. «Uno de ellos fue liberado de la cárcel tras ser condenado a cadena perpetua«, dice a EL PERIÓDICO. Con el paso del tiempo, la existencia de los palestinos de la Cisjordania ocupada se ve reducida a un espacio cada vez menor, aunque igual de violento.
[–>[–>[–>Sólo en el último mes las fuerzas israelíes y los colonos han llevado a cabo 2.350 ataques en los territorios palestinos ocupados. «Un ciclo continuo de terror», lo ha descrito la Comisión de Resistencia a la Colonización y al Muro de la Autoridad Palestina, encargada de contabilizar este macabro balance. Las tropas del Ejército israelí han sido las autoras de al menos 1.584 ataques, que incluyen agresiones físicas directas, la demolición de casas y el desarraigo de olivos en plena temporada de recolecta de la aceituna. La mayor parte de la violencia se ha concentrado en las gobernaciones de Ramala (542), Nablus (412), desde donde habla Mona, y Hebrón (401).
[–> [–>[–>Los colonos israelíes chocan con los agricultores palestinos durante la campaña de recolección de aceitunas, cerca de la ciudad cisjordana de Ramallah, el 29 de octubre. / ALAA BADARNEH / EFE
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A su vez, los colonos han desatado su agresivo odio con 766 agresiones sólo durante el mes de octubre. Se trata de un nuevo máximo por parte de estos habitantes de los asentamientos ilegales. También han concentrado su brutalidad en las mismas tres gobernaciones. Contra quienes han sido más violentos es contra los recolectores de aceitunas, que el jefe de la Comisión, el ministro Muayyad Shaban, los define como víctimas de «terrorismo de Estado, orquestado en las sombras del gobierno de ocupación». «Las milicias colonizadoras perpetran estos ataques terroristas con total desprecio por los derechos humanos y la ética más básicos», ha añadido, exigiendo una «postura internacional firme que proteja al pueblo palestino y salve al mundo de sus continuas deficiencias morales».
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Acciones del Gobierno israelí
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Mientras soldados y colonos siembran el terror sobre el terreno, las autoridades israelíes se encargan de transformar la tierra palestina. Desde principios de este año, se han licitado un total de 5.667 viviendas en asentamientos, según recuentos de la organización israelí de derechos humanos Peace Now. Esto supone un récord histórico, que supera en un 50% al del año récord anterior, que fue 2018 con 3.808 viviendas. «Después del ataque del 7 de octubre de 2023 [por parte de Hamás y la posterior guerra en Gaza]El Gobierno israelí ha aprovechado la situación para seguir aplicando su plan, que está claro para todos: una Estado de supremacía judía entre rio [Jordán] y el mar [Mediterráneo]», confirma Mauricio LapchnikActivista israelí contra la ocupación. «Lo están consiguiendo poco a poco», afirma a este diario.
[–>[–>[–>Sólo en el mes de octubre los colonos han intentado establecer siete nuevos asentamientos en territorio palestino en las gobernaciones de Hebrón y Nablus. Además, han destruido y envenenado 1.200 olivos allí y también en Ramala, Tubas, Qalqilya y Belén. Durante las últimas semanas, se han registrado imágenes desoladoras, como la de campos de olivos milenarios calcinados o soldados pegando a mujeres y ancianos en sus tierras ancestrales. El informe describe varios casos de vandalismo y robo perpetrados por israelíes en connivencia con las tropas. Los centenares de activistas occidentales e israelíes que se han movilizado para proteger a los recolectores palestinos en esta temporada que es clave para su economía el resto del año, además de un importante símbolo cultural palestino, de nada han servido.
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Soldados israelíes en las calles de Hebrón, el 1 de noviembre. / MAMOUN WAZWAZ / CONTACTO / EUROPA PRESS
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Enterrar la idea de un Estado palestino
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Durante los últimos dos años, la Cisjordania ocupada ha sufrido unos cambios radicales, y se prevé que tengan lugar más. Este miércoles el Consejo Superior de Planificación de Israel, que forma parte de la Administración Civil del Ejército israelí que supervisa este territorio, se reunirá para debatir la construcción de otras 1.985 nuevas unidades de viviendas en los asentamientos. El derecho internacional considera que estas colonias son ilegales, pero, en ellas, ya viven más de medio millón de israelíes tras décadas de crecimiento exponencial e inacción global. Sin embargo, en los planes de paz como el propuesto por el presidente estadounidense Donald Trump para la Franja de Gaza, no suele haber mención de Cisjordania.
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[–>«No es un plan de paz, es un acuerdo entre gobiernos, que no incluye a las personas involucradas», critica Marwa Hammad, de la organización palestina Women of the Sun, desde Belén. «Cuando los países dicen que reconocen el Estado de Palestina, ¿saben lo que está pasando sobre el terreno? ¿Nos van a tratar como un Estado palestino?», se pregunta, denunciando la inconcreción de todas las medidas relacionadas con la soberanía palestina. Además, en agosto, el ministro de Finanzas israelí, el colono ultaderechista Bezalel Smotrich, afirmó que los planes para construir miles de viviendas como parte del proyecto de asentamientos E1 propuesto en Cisjordania «entierran la idea de un Estado palestino». Aunque la Administración Trump se ha opuesto a la anexión israelí de Cisjordania, ha hecho poco, o más bien nada, para detener los cambios sobre el terreno.
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