Las grandes energéticas españolas cierran un año agitado y desigual en los resultados de sus negocios, pero con la misma política retributiva al accionista. Iberdrola, Endesa, Naturgy y Repsol han anunciado al mercado un aumento de los dividendos que repartirán el próximo año.

El año ha estado marcado por el apagón eléctrico, los bailes de accionistas, el debate sobre el cierre nuclear, las polémicas remuneraciones a las redes o las tensiones geopolíticas.

Un escenario que no ha impedido que la mayoría de las empresas del sector energético han cosechado buenos resultados, que trasladarán al bolsillo de sus accionistas en 2026.

La mayor eléctrica del país ha aprobado un dividendo récord respaldado por los beneficios obtenidos en los nueve primeros meses. La cotizada presidida por Ignacio Sánchez Galán espera alcanzar un beneficio de 6.600 millones a finales de 2025 y tiene un ambicioso plan de expansión internacional.

De esta forma, Iberdrola ha anunciado que pagará 0,25 euros por acción como dividendo a cuenta el próximo 2 de febrero, tras el último día con derecho a cobro el 12 de enero. Se trata de un pago casi un 9% superior al del año anterior. que ascenderá a unos 1.700 millones de euros a sus accionistas-

La eléctrica mantiene su modelo de dividendo flexiblees decir, el dividendo Se puede cobrar en acciones o en efectivo.. La cifra se sumará al dividendo complementario, que será aprobado en la próxima Asamblea General de Accionistas y se pagará en el tercer trimestre de 2026.

Endesa, por su parte, ha acordado repartir un dividendo a cuenta de los resultados del ejercicio 2025 por importe de 0,5 euros brutos por acción el próximo 12 de enero. No obstante, la remuneración total será de 1,5 euros por título, según las previsiones de la sociedad controlada por la italiana Enel.

El plan estratégico del grupo incluye un política de dividendos hasta 2027 con una pago 70% de las ganancias ajustadasmanteniendo al menos la distribución de un euro por acción.

Repsol y Naturgy aumentan sus dividendos

Repsol es otra de las grandes energéticas del país que aumenta su retribución al accionista, pese a haber sufrido la volatilidad del petróleo en sus cuentas, así como el bloqueo de Estados Unidos a Venezuela.

Pero la compañía dirigida por Josu Jon Imaz dispone de un flujo de caja resiliente con el que hacer frente a la retribución de sus accionistas. La petrolera superará el euro bruto por acción en 2026, mientras continúa con las recompras de acciones.

En cuanto a Naturgy, la empresa que preside Francisco Reynés espera obtener beneficios de 2.000 millones de euros a finales de este año. Cabe destacar que desde finales de abril tanto Naturgy, Iberdrola como Endesa se benefician del modo de operación reforzado de Red Eléctrica.

El operador del sistema trabaja así para evitar un nuevo apagón, aumentando los costes de las restricciones técnicas mediante las cuales se inyecta más energía convencional (gas y nuclear). Red Eléctrica ha pagado más a los propietarios de las centrales por su mayor disponibilidad desde entonces.

Tras la exitosa opa, los principales propietarios de Naturgy lideran un baile accionarial que promete continuar en 2026, aunque el atractivo dividendo que ofrece mantiene inmovilizado su capital, de momento.

De esta forma, el plan estratégico que el grupo presentó en febrero para el periodo 2025-2027 establece una política de dividendos creciente, situando el pago en 1,80 euros por acción en 2026 y 1,90 euros en 2027.

Se posiciona así como una de las empresas más rentables del Ibex 35 y del sector energético, con una rentabilidad esperada que supera el 6-7% en muchas estimaciones.

Con todo, las grandes energéticas españolas empezarán el año con una lluvia de dividendos que mantendrán el atractivo de sus acciones en el mercado, independientemente de sus buenos o malos resultados.