La madre que encerró con llave a su hija de 16 años y a su hijo de diez meses sin comida ni medicinas en Mallorca ya lo había hecho otras veces
La madre que encerró con llave en su domicilio a su hija de 16 años y a su hijo pequeño de tan solo diez meses en su casa de Calvià (Mallorca) ya lo había hecho en anteriores ocasiones. En vista de la calamitosa situación en la que se encontraban, la Fiscalía de Menores estudia solicitar la retirada de la custodia de la progenitora sobre sus dos vástagos se trasladen a un centro de acogida del Institut Mallorquí d’Afers Socials (IMAS) del Consell de Mallorca. La Guardia Civil detuvo a esta mujer, rusa de 37 años, por presuntos delitos de violencia doméstica y abandono de menores.
Los hechos ocurrieron la tarde del pasado domingo en Calvià. La hija mayor había llamado a los servicios de emergencia para pedir auxilio y denunciar la precaria situación en la que se encontraban los dos hermanos. A continuación agentes de la Guardia Civil se trasladaron al domicilio para averiguar qué era lo que ocurrí y encontrarse ante un supuesto caso de abandono de menores. Cuando la patrulla llegó al lugar, los agentes hallaron a la hermana mayor asomada al balcón de la primera planta esperando a que los agentes llegaran.
Los agentes comprobaron que la puerta principal estaba cerrada con llave y la adolescente no podía abrirla desde dentro. A continuación la hija se puso en contacto con los agentes en un patio de la planta baja, la patrulla del instituto armado se entrevistó con la menor. Esta estaba sola y a cargo de su hermano de corta edad.
Malos tratos físicos y psicológicos.
La hija explicó que no podía salir de su casa. Máxime que si lo hacía su hermano de diez meses se quedaría completamente desvalido y solo en el domicilio. Su madre les había encerrado el día anterior y no les había dejado comida suficiente ni las medicinas que precisaba el pequeño. Indicó a los agentes que se encontraba sola en su casa, sin poder salir, con su hermano pequeño de tan solo diez meses. La primogénita fue más allá y ahondó en la precaria situación en la que se encontraban los dos. También hizo constar que habían sufrido reiterados episodios de malos tratos físicos y psicológicos desde mucho tiempo atrás.
La Guardia Civil estableció como una absoluta prioridad la localización de la madre para traerla al domicilio donde se encontraban sus hijos. Una vez que la encontraron le instaron a que les abriera la puerta. La mujer presentaba síntomas compatibles con una intoxicación etílica. Cuando esta abrió la puerta, los agentes la acompañaron y comprobaron el lamentable estado en el que había dejado a sus hijos. A continuación fue detenida por un presunto abandono de menores y por violencia doméstica.
A raíz de tener conocimiento de este caso, la Fiscalía de Menores planteó solicitar la retirada a la madre de la custodia sobre sus dos hijos. De ser tenida en cuenta, los menores residirían a un centro de acogida del IMAS del Consell de Mallorca.
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