La mayoría de cortinas están hechas de plástico y lo respiras en casa, pero hay alternativas



Hay muchos aspectos a los que debemos prestar atención si queremos vivir en un hogar saludable y libre de productos tóxicos. Algunas son muy obvias, pero otras pueden pasar desapercibidas, como algunas de las Telas con las que vestimos nuestra casa..
Muchos de ellos, aunque no lo parezca, están fabricados en plástico y cuando se desgastan liberan partículas que acabamos respirando. Ana Rubal, técnica superior en gestión de recursos naturales y creador de Bambú y Lana, nos explica qué debemos buscar y qué tejidos son los mejores.
Por qué evitar las cortinas de poliéster
Muchos tejidos que nos parecen inofensivos en realidad esconden materiales nocivos para la salud, especialmente los de cortinas. «Un porcentaje muy elevado de cortinas disponibles en el mercado son poliéster», explica Rubal (@bambuylana.vidasostenible).


El poliéster es un material sintético. derivados del petróleo,es realmente un plástico transformado en alambre poder hacer telas«.
Con el tiempo, las cortinas se desgastan y se convierten en un problema para el ambiente de tu hogar. «Es probable que se desintegren y debajo encuentres muchas cosas. polvo coloreado en forma de cortina«, indica el experto. Este polvo es microplásticos procedente de la cortina.
Factores como exposición al sol y la humedad o lavado Puede acelerar la degradación de los tejidos de poliéster. Además, «cuanto más delgados son, más rápido se deterioran. Los tejidos más gruesos tienen más durabilidad.«, asegura. Este desgaste también se produce en los tejidos naturales, pero la diferencia es que estos no desprenden partículas de plástico como ocurre con las cortinas de poliéster.
¿Cómo nos afectan estas partículas liberadas?
Los tejidos sintéticos fabricados a partir del petróleo no son nada respetuosos con el medio ambiente ni con la salud. Cada vez hay más pruebas de que Los microplásticos y nanoplásticos pueden entrar en nuestro cuerpo. por inhalación, ingestión o contacto con la piel.
Su exposición está asociada a múltiples efectos nocivos en todas las etapas de la vida, desde problemas reproductivosalteraciones endocrinas o del desarrollo cognitivo, enfermedades cardiovasculares, diabetes, obesidad e inflamación. También se cree que causan o agravan alergias.
Se ha descubierto que los microplásticos liberados por las cortinas de poliéster aumentan nuestra exposición diaria a plásticos y partículas tóxicas.
«Al lavarse también sueltan partículas al agua, y de momento no es habitual que los purificadores sean capaces de filtrar estas partículas tan pequeñas, Luego ingresa a la cadena alimenticia. (peces que los comemos y luego los comemos nosotros, en el agua que bebemos, sal, etc.)“, explica Rubal.
Además de los propios plásticos, también hay que tener en cuenta el tintes utilizados en estas cortinas. «Cuando se exponen a la luz solar, pueden emitir COV (compuestos orgánicos volátiles).«.
Más allá del riesgo que suponen para la salud humana, estos materiales sintéticos también suponen un peligro para el medio ambiente. «Al final de su vida útil, es muy poco probable que se reciclenlo que seguirá contaminando su destino, ya sea un vertedero o el desierto de Atacama, famoso por la montaña de ropa desechada que se acumula.», lamenta el experto.
Las mejores alternativas a las cortinas de poliéster
Los tejidos naturales son una alternativa mucho más saludable a las cortinas de poliéster y Ana Rubal recomienda dos en concreto:
- Él algodon organico
- Él lino


«Por relación calidad-precio y facilidad de mantenimiento Yo elegiría algodón orgánico.«, nos explica. Una buena opción, si tienes conocimientos de costura, es hacerlos tú mismo en casa porque, según Rubal, «Hoy en día puedes encontrar tejidos de algodón orgánico que son totalmente naturales, sin tintes ni tratamientos en el tejido.«.
Son telas que no tienen tratamiento antiarrugas y una vez lavadas se pueden arrugar ligeramente, lo que para ella”Eso es parte del encanto de un tejido totalmente natural.«.
Cómo cuidar las cortinas de tejidos naturales.
Los tejidos de algodón orgánico son fáciles de cuidar y se puede lavar en la lavadora sin problema (consulta siempre las especificaciones del fabricante en la etiqueta).
EL frecuencia de lavado Mucho depende del tamaño o condiciones de cada casa:
- Si hay mucho tráfico o contaminación Es necesario lavarlos con más frecuencia:lo mismo una vez al mes o cada 2 meses«, según el experto.
- Si tienes mascotas o alergias.La limpieza también debe ser bastante frecuente.
- Aparte de estas situacionesLa recomendación más común es lavarlos cada 6 meses, pero es recomendable aspirarlos entre lavados.
También suelen aceptar el planchado, aunque nos comenta que en cuanto a durabilidad, “docuanto menos hierro, mejor«.
Finalmente, el experto nos aconseja no tener las cortinas puestas delante de la ventana todo el día recibir sol sin descanso. Cuando no nos moleste el sol, podemos guardarlos recogidos para cuidar el tejido y aumentar su durabilidad.
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